Con el 50,3 por ciento de los sufragios, Van der Belle, antiguo dirigente de los Verdes de 72 años, en un reñido duelo superó por 0,6 puntos, o sea 31.026 votos, a su contrincante Norbert Hofer, que reunió un 49,7 por ciento. Europa sintió cierto alivio ante este resultado.
Viena, (AFP-NA) - Por Philippe Scwab y Sophie Makris. El ecologista Alexander Van der Bellen ganó las elecciones presidenciales de Austria frente al candidato de la ultraderecha Norbert Hofer (FPÖ), tras una reñida segunda vuelta, anunció ayer el ministerio del Interior austriaco.
Varios dirigentes europeos expresaron su alivio después del resultado de estos comicios. Por su parte, la ultraderecha austriaca, así como su alter ego francés, el Frente Nacional, han visto en estos resultados futuros éxitos.
Cerca de uno de cada dos electores votó por el FPÖ, uno de los partidos de extrema derecha más potentes electoralmente en Europa.
Con el 50,3% de los sufragios, Van der Belle, antiguo dirigente de los Verdes de 72 años, superó por 0,6 puntos, o sea 31.026 votos, a su contrincante Norbert Hofer, que reunió un 49,7% de los sufragios.
Les agradezco su apoyo. Por supuesto, hoy (por ayer) estoy triste, escribió Hofer en su página de Facebook. Los esfuerzos desplegados en esta campaña no fueron en vano, sino que son una inversión para el futuro, añadió.
El FPÖ que avanza en la cabeza de los sondeos para las legislativas desde hace varios meses, espera obtener la cancillería, el centro ejecutivo del poder, durante las próximas elecciones parlamentarias de 2018.
Al igual que el ministro italiano de Relaciones Exteriores Paolo Gentiloni, el primer ministro francés Manuel Valls expresó su alivio al ver a los austriacos rechazar el populismo y el extremismo.
El futuro jefe del Estado austriaco, que asumirá sus funciones a partir del 8 de julio, se comprometió a ser un presidente por encima de los partidos para representar en toda su diversidad a un país, cuyas elecciones revelaron las divisiones.
El voto por correo escrutado ayer, tradicionalmente poco favorable al FPÖ, inclinó la balanza finalmente a favor del candidato ecologista, de tendencia liberal y centrista, al final de un verdadero thriller electoral.