Pergamino

Las tarjetas de crédito, cada vez más presentes en la economía familiar: ahora financian los alimentos


 Para cuidar su bolsillo consumidores finales realizan sus compras en supermercados mayoristas (ARCHIVO LA OPINION)

'' Para cuidar su bolsillo, consumidores finales realizan sus compras en supermercados mayoristas. (ARCHIVO LA OPINION)

Las estadísticas nacionales indican que este fenómeno se afianza debido a que a los asalariados les cuesta llegar a fin de mes. A pesar de ser uno de los pocos rubros que aplica intereses a las cuotas, en Pergamino su uso es cada vez más frecuente en los supermercados. Otra estrategia para “estirar” el sueldo, que ha crecido del mismo modo, es adquirir productos de la canasta, en soledad o de manera comunitaria, en comercios mayoristas.

DE LA REDACCION. Hay dos parámetros que, aun sin entender demasiado de economía, todos los consumidores atienden para analizar la marcha de la economía: la cotización del dólar y el índice de inflación. En cuanto a la divisa, debido a ciertas estrategias del Gobierno que apuntan a mantener el clima social hasta las elecciones, se registra un “planchamiento”, con una cotización oficial que se mantiene y una paralela que incluso de tanto en tanto registra un descenso. No sucede lo mismo con la inflación. Si bien se proyecta para 2016 un nivel cercano al 20 por ciento, por el momento no se avizoran bajas en los precios sino, por el contrario, incrementos del tipo “hormiga”, especialmente en el rubro alimentos.

El correlato lógico a este panorama sería una brusca retracción en los niveles de ventas minoristas. Si no sucede es a fuerza de otro fenómeno que propicia el Gobierno para mantener activa a la demanda: la financiación con tarjeta de crédito. 

El uso del “plástico”, como comúnmente se dice, estuvo ligado siempre a la compra de bienes durables pero en la actualidad ocupan un rol cada vez más central para financiar los gastos esenciales de las familias. Esto ha hecho que el uso de las tarjetas haya crecido en enero, según el Banco Central, un impactante 73 por ciento respecto del mismo mes de 2014. 

 

Costo de vida

A los trabajadores les cuesta llegar a fin de mes. Esta situación explica la  paradoja de que al mismo tiempo que cae el consumo de bienes, el uso de las tarjetas crece, sobre todo para la adquisición de los bienes menos durables tales como los alimentos semanales.

A fin de saber si este modo de actuar es también implementado por los pergaminenses, LA OPINION mantuvo contacto con los encargados de algunos supermercados. En coincidencia, todos afirmaron que la clase media usa el plástico cada vez más para llegar a fin de mes y mantener su estándar de vida. “Nosotros otorgamos financiación de nuestros productos hasta en tres cuotas, tengo entendido que otros sólo ofrecen una sola cuota. Los consumidores muchas veces piden más plazos para pagar lo que en realidad van a consumir en un mes. Es alarmante la situación en este sentido”, aseguró un supermercadista.

 

Tendencia confirmada

Nelson Figueredo es el presidente de la Cámara de Alimentarios de Pergamino, una entidad que mensualmente realiza una estadística, entre las despensas y autoservicios, para calcular la inflación local de comestibles, productos de tocador y limpieza, lácteos y pastas, panificación, frutas y verduras y carnes.

Consultado por LA OPINION, Figueredo afirmó que, en consonancia con la tendencia que se registra a nivel nacional, en Pergamino es notoria la creciente utilización de la tarjeta de crédito para las compras de alimentos. “Venimos registrando el incremento del uso de la tarjeta de crédito desde principios de año. Nosotros no contamos con el beneficio de las 12 cuotas sin interés porque nuestros comercios sólo venden alimentos y este plan que lanzó el Gobierno ‘Ahora 12’ está destinado a la compra de bienes durables. De todos modos notamos que las personas solicitan el crédito en la compra de alimentos. En muchos casos realizan las compras hasta en tres cuotas. Hemos advertido un uso más cotidiano de la tarjeta de crédito. Años anteriores a nadie se le hubiese ocurrido ir a comprar al autoservicio con la tarjeta de crédito pero ahora sí”, manifestó Figueredo. 

 

Convenios con los bancos

El uso del plástico se viene incrementando a pasos agigantados en el país y Pergamino no es la excepción. Desde la Cámara de Alimentarios, a modo de dar solución a las bajas en los niveles de ventas que se registra, se mantiene contacto con el Banco Galicia al efecto de poder brindarles a los asociados, pequeños y medianos comerciantes, algunos beneficios que atraigan al consumidor, como la instalación del Posnet, el dispositivo telefónico que permite la transacción online. Esto ayudaría también a los representados de la CAP a “aggiornarse” y para poder dar cumplimiento a una resolución de la Afip que aún no está plenamente en vigencia. “La idea es que los asociados, a través de este acuerdo, no pierdan ventas que se fugan a los grandes supermercados y por otro lado estamos siendo precavidos respecto de esta resolución de la Afip”, contó el dirigente.

Según transmiten los comerciantes a las autoridades de la Cámara, los consumidores demandan hoy el pago con tarjeta. Ante esto los pequeños autoservicios y despensas se ven en condiciones de inferioridad. Y a la hora de implementar el sistema, no todos ellos pueden acceder a los requisitos que imponen las casas bancarias.

 

Amortiguar la inflación

Como dirigente del ámbito comercial, Figueredo brindó su punto de vista con relación a la utilización de la tarjeta de crédito en la compra de productos de primera necesidad como es el alimento. “Las compras abonadas con tarjeta de crédito aparejan algunas desventajas pero por otro lado puede verse el lado positivo. El perjuicio va de la mano de la triste situación inflacionaria que atraviesa el país y que hace que el asalariado llegue ajustado a fin de mes, económicamente hablando. Sin embargo se puede ver, si se quiere, un lado positivo. Muchas personas utilizan este sistema para de algún modo ganarle a la inflación. Quien asiste al supermercado debe tener en claro que con el pago de la mercadería en tres cuotas, por ejemplo, se está endeudando pero también debe saber que al momento de pagar en su totalidad la mercadería le está ‘ganando’ a la inflación ya que seguramente desde que hizo la compra hasta que lo abona el producto sufrió modificaciones en su precio”, agregó el dirigente.

 

Precios Cuidados

Gracias a las gestiones de la CAP, el año pasado llegaron a autoservicios y almacenes los Precios Cuidados, que inicialmente eran privativos de las grandes cadenas. De todos modos, no tiene en estos casos el alcance total sino que funciona pero no en los más de 200 productos que la Secretaría de Comercio maneja. 

“Son varios los autoservicistas que implementan este plan en nuestra ciudad”, comentó Figueredo, y sugirió a los comerciantes que no tengan resquemor de aplicarlos, además advirtió que aun con la rebaja establecida, se mantiene el margen económico de utilidad. 

“Dentro de los programas que se aplicaron históricamente por los distintos gobiernos para mantener el nivel de precios ninguno funcionó pero entiendo que este sistema implementado por Augusto Costa está siendo efectivo”, consideró Figueredo.

También el dirigente se refirió al “cuco” del precio de la carne: “Mensualmente en el análisis que realizamos advertimos que hay otros productos, por ejemplo el arroz, que aumenta mucho más que la carne. Lo mismo pasa con las frutas y verduras. Estas son las variables que el consumidor no registra”.

 

Al mayorista

A la par de la creciente utilización de la tarjeta de crédito, una tendencia que también se impone es la de comprar alimentos en los supermercados o distribuidoras mayoristas. 

En el afán por mitigar el efecto de la inflación en los bolsillos, hoy los consumidores recurren menos a los autoservicios y almacenes de barrio e intentan hacer rendir más sus presupuestos en las bocas mayoristas y en las tiendas de descuento. Incluso es habitual que las compras de bienes envasados en grandes cantidades sean compartidas por grupos de familias.

En el último año, el canal mayorista incrementó un 25,4 por ciento su participación de mercado. En tanto las bocas de descuento (supermercados de ahorro) lo hicieron un 17,8 por ciento, según los datos que maneja la consultora Kantar Worldpanel. En diálogo con el encargado de un comercio de este tipo, el Diario pudo saber que en los últimos años se registra una cantidad importante de particulares que aprovechan las ofertas que este tipo de comercios brinda resignando de esta manera el consumo de primeras marcas comestibles.

 

¿Competencia desleal?

Consultado respecto de este tema, Figueredo manifestó que se trata de una “competencia desleal”. “Es lamentable que tengamos que afirmar que esta tendencia también crece. Los supermercados mayoristas preparan el marketing publicitario para ofrecer al público sus productos. Estamos disgustados con esta noticia porque entendemos que nuestro sector está atravesado por la falta de control en este sentido. Se ha perdido la ética en la comercialización”, aseguró con énfasis el titular de la CAP, al tiempo que agregó que “lo que ellos hacen es totalmente lícito porque no hay legislación que les prohíba vender al consumidor final pero éticamente no es correcto. Necesitaríamos que exista una regulación en el comercio que imponga límites  al comercio mayorista y al minorista. En este país cuando no hay leyes se producen actos deshonestos. No podemos culpar a los consumidores porque ellos cuidan su dinero ya que comprando en un comercio mayorista se ahorra entre un 18 y un 25 por ciento”.

 

 

Para la CAP en abril se registró una inflación del 1,4 por ciento

 

La Cámara de Alimentarios de nuestra ciudad ha informado la inflación registrada en abril. “Hubo un aumento de precios bastante aceptable, en relación a los que veníamos teniendo meses anteriores. El promedio general de aumentos en la canasta que controlamos arribó a un 1,4 por ciento”, indica el informe elaborado por la institución local.

En fiambres hubo un ajuste del 3,9 por ciento, que responde al incremento de las carnes frescas con las que se elaboran. Los productos envasados de almacén subieron en un promedio del 2,6 por ciento. Seguido a ellos las frutas y verduras incidieron en la canasta del mes con un promedio del 2,1 por ciento aunque los productores del sector advierten una fuerte desaceleración del consumo en el mes analizado. Las bebidas ajustaron en 1,6 por ciento. Los productos lácteos treparon en un 1 por ciento, de acuerdo con las autorizaciones de la Secretaría de Comercio de la Nación, que a través del programa de Precios Cuidados mantiene controlados los ajustes del sector. Seguidamente se registró un muy sensible aumento en carnicerías, de 0,3 por ciento, y en Pastas Frescas del 0,8; en el rubro Panaderías se advirtió una baja del 1 por ciento al igual que en las pollerías, cuyo porcentual fue del -1,6 por ciento. 

Los artículos de tocador o Perfumería incrementaron su promedio en 2,9 por ciento mientras que los de limpieza lo hicieron en un 1,3 por ciento. 

Los establecimientos gastronómicos debieron ajustar en un 1,9 por ciento sus listas; mientras que las rotiserías y casas de comidas lo hicieron en un ínfimo 0,8 por ciento. En el estudio se puede observar que los artículos envasados en los grandes supermercados de cadenas han trepado en un 3,7 por ciento mientras que en el canal de autoservicios locales, “chinos” y almacenes tradicionales solo aumentó el 2,6 por ciento. Esto se debe a que los últimos mencionados no son formadores de precios y reciben las actualizaciones con posterioridad al canal de las cadenas.

Párrafo aparte merece comentar la problemática que en abril generó el Inal (Instituto Nacional de Alimentos), mediante su reciente disposición en la que elevó los aranceles que cobra por sus trámites y servicios, reemplazando una tabla de valores que regía desde enero 2014 y que, según los empresarios nucleados en la Copal (Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios), aumentó entre un 100 y 200 por ciento respecto del año pasado, especialmente para productos e insumos importados que se utilizan en la elaboración de alimentos. Esto provoca una importante incidencia en muchos de los artículos de consumo masivo y no guarda relación con la inflación anual real que se midió entre enero 2014 y abril 2015.

Con este índice promedio del 1,4 por ciento en abril, se arriba al primer cuatrimestre del año con un acumulado del 8,60 por ciento en la canasta alimentaria actual contra el 21,9 por ciento del mismo período el año anterior.


Otros de esta sección...
BuscaLo Clasificados de Pergamino y su región
Buscar en Archivo
Tapa del día
00:00
15:42
Errores:  0
Pistas:  38

Tu mejor tiempo:
12:07
Registrate o Ingresá para poder guardar tus mejores tiempos.

Nueva Partida
1 2 3 4 5 6 7 8 9
Editorial
Funebres
Perfiles Pergaminenses
Lejos del pago
Farmacias de turno

LO MÁS LEÍDO