Silvana Zini: “Tenemos un rico patrimonio arquitectónico y es importante que se conozca”

Un nuevo relevamiento incluye en el Programa de Preservación del Patrimonio Cultural a unos 71 inmuebles, algunos ya conocidos por su valor histórico y arquitectónico, y otros ocupados como viviendas familiares, instituciones y comercios. “Este año la idea es empezar a trabajar junto al Museo de la Ciudad, Turismo y Patrimonio”, adelantó Zini.

DE LA REDACCION. Nuestra ciudad inició en el año 2006 una campaña de preservación y promoción del patrimonio arquitectónico, sobre un trabajo de relevamiento realizado por la arquitecta Silvana Zini, titular de la Comisión del Patrimonio de Cultura de la Municipalidad, la entonces Dirección de Cultura, Obras Públicas y la Secretaría de Producción.

El edificio de la Sociedad Española de Socorros Mútuos, ubicada en Avenida de Mayo 565, fue el primero de una lista de treinta edificios considerados de valor histórico, entre ellos Sociedad Rural, Club Social, Escuela Municipal de Bellas Artes, la Municipalidad, el exHotel de Roma, las parroquias Nuestra Señora de la Merced, Santa Teresita y Perpetuo Socorro, entre otros.

Zini, que en 2016 pasó al área de Patrimonio de la Subsecretaría de Cultura, viene trabajando en este tema desde el año 2000, y es autora de una serie de notas alusivas publicadas por LA OPINION: “Estancia Santa Margarita: recuerdo de la Argentina potencia de 1900” (2002), “Ranchos de adobe, testigos del pasado” (2002), “Aprender a mirar” (2003), entre otras. 

“Siempre me interesó el tema y me dije por qué no empezar a hacer algo por nuestro patrimonio y comencé con un cuaderno y una máquina fotográfica a recorrer la parte céntrica de la ciudad. Fui fotografiando y tomando datos de las planchetas de catastro. Así fui armando un inventario de los edificios que yo consideraba que tenían valor patrimonial o valor arquitectónico”, explicó la arquitecta en diálogo con LA OPINION, al tiempo que aclaró que “en un principio lo encaré desde el punto de vista arquitectónico”.

La investigación llevó a Zini a catalogar a los edificios tanto por su valor arquitectónico como por lo histórico. “También los que tienen un valor distinto para la sociedad como los que representan una colectividad, por ejemplo la Sociedad Española o coliseos que fueron muy importantes en una época y que lamentablemente ya no están como el Teatro Verdi, o los que por suerte seguimos conservando, como el exHotel de Roma”, puntualizó la funcionaria.

Un nuevo relevamiento publicado en 2015 en una ordenanza por el Concejo Deliberante, incluye en el Programa de Preservación del Patrimonio Cultural a unos 71 inmuebles de la ciudad, algunos ya conocidos por su valor histórico y arquitectónico, y otros ocupados como viviendas familiares, instituciones y comercios.

“Aunque creo que ya todos tienen conocimiento, la idea es empezar a comunicarles a esos propietarios que su casa tiene un valor patrimonial, arquitectónico”, señaló Zini y agregó: “Por suerte en la mayoría de las viviendas siguen viviendo los mismos propietarios y otras son instituciones que se conservan”.

A partir de la ordenanza del año 2012, se formó una comisión municipal de Patrimonio Cultural con miembros del Ejecutivo, del Legislativo y del Colegio de Arquitectos.

Según adelantó Zini “este año la idea es empezar a trabajar junto al Museo de la Ciudad, Turismo y Patrimonio. Este equipo de trabajo va a estar coordinado por Doralisa Inés de la Sota”.

Actualmente Silvana Zini encabeza la Comisión Municipal de Patrimonio Cultural junto a Carlos Stradiot, Flavia Mengascini y Mónica Badano, y los concejales Rosa Tulio, Vicente Ardissone, Andrea Bosco y Carlos Elizalde.

“En 2012 se aprobó una ordenanza de protección del Patrimonio Cultural. Esto significa que no solo se protege el patrimonio arquitectónico sino también todo lo referente a la cultura, desde los bosques de eucaliptos, las casuarinas de la plaza 25 de Mayo, los jacarandás de la Avenida de Mayo, un farol antiguo, es decir elementos muebles e inmuebles”, precisó. 

“En estos últimos tiempos hemos declarado una ordenanza de protección de determinados edificios, que es sobre lo que estamos trabajando actualmente”.

Otra de las inquietudes es realizar un relevamiento sobre Patrimonio Rural. Hay muchos palomares, ranchos de adobe, por ejemplo. Hay mucho para trabajar”, aseguró.

-¿Cuántos son los edificios considerados actualmente de valor patrimonial?

Junto a los que ya se han declarado como la Parroquia La Merced, el Municipio, el exHotel de Roma, el Reducto Rural Fortificado –el único monumento nacional que tenemos-, entre muchos otros, serán más de ochenta. Tenemos un rico patrimonio arquitectónico en nuestra ciudad y es importante que la gente lo conozca.

Circuitos turísticos

Precisamente una forma entretenida de conocer el patrimonio son los circuitos turísticos. “Soy muy partidaria de hacerlos”, afirmó la profesional y recordó que las primeras experiencias fueron en 2002-2003 “cuando comencé a trabajar con la gente de Turismo”. Los primeros recorridos incluían estancias de algunos pueblos del Partido.  

Años después, en 2013, con la organización de la Asociación Descendientes de Emilia Romagna de Pergamino con el apoyo del Fondo de Promoción Cultural, a dirección ejecutiva  de la licenciada Carla Torchelli y la coordinación y guía de la arquitecta Silvana Zini, se concretó el Recorrido Histórico Turístico en bus y visitas a los edificios arquitectónicos emblemáticos de Pergamino. 

El paseo incluía una visita a la casa del Dr. Arturo Illia, a la Municipalidad, Iglesia Merced, Colegio del Huerto, Casa de la Cultura; fachadas en calle San Nicolás, entre 11 de Septiembre y General Paz; viviendas de calle Florida, entre San Nicolás y 25 de Mayo, construidas alrededor de 1930; exTeatro Verdi, en calle Merced; edificios representativos de calle San Nicolás, entre Pueyrredón y San Martín; Sociedad Española; la exfábrica Berini; el predio ferroviario; el Archivo Histórico, entre otros. Esta misma experiencia fue repetida en la última edición de la Noche de los Museos.

“En la Noche de los Museos propuse hacer un circuito. Me dio un poco de miedo por la cantidad de ofertas que había, pero por suerte me acompañaron más de 50 personas -indicó Zini-. La gente se mostró muy interesada y preguntaban: para cuándo la ordenanza, no queremos que los demuelan, queremos conservar nuestro patrimonio. Así que esa experiencia fue muy interesante y tenemos la idea de repetirlo”.

La influencia europea

-¿Qué se tiene en cuenta o cuáles son los fundamentos para considerar un edificio de valor patrimonial? 

-Se deben tener en cuenta dos aspectos, el histórico, es decir lo que significó el edificio en la historia de la ciudad; y el arquitectónico. Cuando comenzaron a llegar a nuestro país las grandes olas inmigratorias, la mayoría eran italianos y constructores, por eso la mayoría de las obras de Pergamino fueron hechas por italianos, por ejemplo Rossi, Trincavelli, Monti, Bontempo; a los que se suman las grandes herrerías de la época como Berini y Nipoti.

Esta corriente inmigratoria de fines de 1800 y principio de 1900 que hizo grande al país y a Pergamino, declarada ciudad en 1895, provocó que mucha gente adinerada –hacendados o comerciantes que habían prosperado- comenzaran a copiar arquitecturas europeas y a construir casas de un valor de las que algunas todavía persisten. 

“Hay mucho para trabajar”

Tal lo expresado por la arquitecta Zini, “hay mucho para trabajar” en Patrimonio cultural en Pergamino. Si bien los primeros pasos están dados, las acciones no deben demorarse sobre todo porque tal patrimonio requiere de una gestión dirigida a resguardarlo de aquellos intereses particulares que tienden a ponerlo en riesgo. En función de ello es responsabilidad del Estado dirigir procesos para su adecuada gestión, involucrando a la ciudadanía y al conjunto de actores que intervienen.

Son varios los ejemplos cercanos a tener en cuenta: la ciudad de San Nicolás cuenta con un Código Urbano Ambiental, así como San Antonio de Areco y Junín implementan sus ordenanzas, por mencionar tres ciudades cercanas.

Pergamino está empezando a poner en práctica la ordenanza en algunos casos puntuales para salvaguardar el patrimonio histórico, herencia de generaciones pasadas que forma parte de la memoria colectiva y de la identidad cultural.