Mediante un extenso comunicado publicado en su página Web y difundido por las redes sociales, la mandataria criticó a los fiscales y jueces convocantes de la marcha que, según dijo, no fue para nada un acto de homenaje al fallecido fiscal Alberto Nisman, con la obvia excepción de sus familiares directos. También dijo que son destituyente.
Buenos Aires, (NA) - La presidenta Cristina Kirchner calificó ayer a la movilización del 18 de este mes como simple y sencillamente una marcha opositora y sostuvo que fue el bautismo de fuego del Partido Judicial, al tiempo que lanzó duras críticas contra jueces y fiscales. Mediante un extenso comunicado publicado en su página Web y difundido por las redes sociales, la mandataria criticó a los fiscales y jueces convocantes de la marcha que, según dijo, no fue para nada un acto de homenaje al fallecido fiscal Alberto Nisman, con la obvia excepción de sus familiares directos.
La presidenta indicó que durante la movilización se pudo ver en vivo y en directo, a dirigentes políticos riéndose a carcajadas y también a manifestantes llevando carteles con leyendas ofensivas e insultantes contra el Gobierno.
Según evaluó, esto tuvo un único e inmenso mérito que es el que en la Argentina se puede disentir, se puede insultar al Gobierno y a la presidenta, y se puede marchar libremente.
No siempre fue así, y no hablo de la dictadura. Aún recuerdo lo que les pasó a los que se les ocurrió disentir el 19 y 20 de diciembre del 2001, en la Plaza de Mayo, agregó.
Luego, dedicó su comunicado a cuestionar en duros términos a los convocantes de la marcha, a quienes identificó como parte del Partido Judicial que, según dijo, es el nuevo ariete contra los gobiernos populares.
Ese Partido Judicial debe aparecer con respaldo masivo
(no popular, concepto impensable para los que concurrieron al evento) que avale y dé aires de legalidad a cualquier mamarracho judicial, sostuvo la mandataria.
En uno de los tramos más duros del comunicado, afirmó que el verdadero hecho político e institucional de la marcha del 18 F fue la aparición pública y ya inocultable del Partido Judicial.
Ante ello, consideró que se trata del nuevo ariete contra los gobiernos populares, que suplanta al partido militar en el rol que, en el trágico pasado, asumiera respecto de gobiernos con legalidad y legitimidad democrática.
En este sentido, afirmó que ya no se trata de golpes violentos, sino que la modalidad es más sofisticada porque articula con los poderes económicos concentrados y fundamentalmente con el aparato mediático monopólico.
Según la presidenta, con esto se intenta desestabilizar al Poder Ejecutivo y desconocer las decisiones del Legislativo, lo que lo convierte a ese Partido Judicial en un superpoder por encima de las instituciones surgidas del voto popular.
Tras calificar como inédita la convocatoria de los fiscales, subrayó que no deja de ser una curiosidad que dos de ellos fueron acusados por familiares de las victimas de obstaculizar la causa Amia y la tarea del propio Nisman, en referencia a Raúl Pleé y Germán Moldes.
También le apuntó al fiscal Carlos Stornelli, al recordar un informe producido por periodistas españoles en el que se señalaba su vinculación con barras bravas.
Otro de los blancos del extenso comunicado de casi 18 mil caracteres fue el secretario general de la Unión de Empleados Judiciales de la Nación, Julio Piumato: Tampoco fue una marcha del silencio, porque el mismo fue sonoramente roto por un orador sindical integrante de una central obrera ferozmente opositora al Gobierno.
La mandataria señaló que este Partido Judicial al mismo tiempo que funciona como armadero de causas, cajonea otras como la de Papel Prensa o la de lavado de dinero denunciada por Hernán Arbizu, exvicepresidente del JP Morgan en la Argentina que detalla con precisión como lavaba dinero de los mismos integrantes del Grupo Clarín.
Es el Partido Judicial que por primera vez en la historia declara inconstitucional un tratado internacional firmado por el Gobierno Nacional y ratificado por el Parlamento, sostuvo, en alusión al Memorándum de Entendimiento con Irán.
Al respecto, la mandataria recordó que tanto la firma del tratado como su aprobación se da en ejercicio de facultades constitucionales que son exclusivas y excluyentes de ambos Poderes y que no son judiciables, tal cual lo marca la propia doctrina de la Corte.
Es el Partido Judicial que no va a elecciones, cuyos miembros no pagan impuestos, tienen sus funciones y prerrogativas de por vida, y en algún caso están por cumplir un siglo. ¿Decime si no te dan ganas de ser juez?, finalizó, haciendo alusión al magistrado de la Corte Suprema Carlos Fayt, que fuera criticado duramente por sus 97 años.
Con conclusión de su texto, Cristina Kirchner subrayó que el Partido Judicial, además de ser Partido, es opositor y destituyente del Gobierno. Pero no de cualquier gobierno. De este gobierno.