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El equipo diseñado y producido por Alejandro Bisi ya funciona en la sala donde se atiende a niños con diversas patologías que afectan su movilidad. El elemento aporta un insumo vital al trabajo que desarrollan los profesionales. La bipedestación contribuye al fortalecimiento de su desarrollo cognitivo y emocional.
Máximo tiene 4 años y su diagnóstico es parálisis cerebral. Desde hace un año asiste dos veces por semana al Servicio de Rehabilitación del Hospital Interzonal General de Agudos San José donde es atendido por un equipo interdisciplinario. Habitualmente se moviliza en un andador y en su casa se vale de algunos equipos para facilitar su movilidad. Este martes por la mañana se lo podía ver guiado por profesionales utilizando el bipedestador diseñado y donado el pasado viernes al Servicio por el bioingeniero pergaminense Alejandro Bisi. Con el movimiento del aparato que les permite a los niños realizar sus ejercicios de rehabilitación erguidos, Máximo sonríe. Del otro lado de la sala, mirándolo a través de un vidrio su mamá, Jésica Arancibia se emociona. Y refiere que “los avances que él ha logrado desde que viene a Rehabilitación son increíbles y ahora con este nuevo equipo con el que cuentan será mucho mejor para él y para otros chicos que asisten”.
“En casa tiene un biped pero no tiene control de movimiento, así que es diferente, esto es maravilloso y los profesionales que trabajan cada semana con él se preocupan mucho porque logre avanzar en su rehabilitación”, comenta en diálogo con LA OPINION.
Máximo asiste un hace un año al Servicio, se moviliza con un andador y verlo de pie utilizando este equipo me produce una enorme emoción, es una muestra más de los resultados que está logrando en su rehabilitación. Yo veo día a día como va progresando, desde que arrancó es un logro importantísimo el que consiguió. Se maneja mejor, me pide cosas, logra comunicarse y responde mucho mejor a estímulos. El cambio es total”, agrega visiblemente conmovida y sin dejar de mirar a su niño.
La doctora Clide Coscia, jefa del Servicio de Rehabilitación del Hospital San José se mostró agradecida al gesto generoso del bioingeniero Alejandro Bisi que el año pasado se acercó a la sala para plantear su intención de desarrollar este equipamiento como parte de su tesis final de grado. “Desde entonces trabajamos mucho con él proporcionándole la información que necesitaba y establecimos un vínculo que se tradujo en el diseño y fabricación de un bipedestador que es el que desde el viernes tenemos funcionando en el Servicio y que sirve para el trabajo con niños de entre 2 y 6 años.
“Alejandro Bisi el año pasado se reunió con nosotros porque quería hacer su tesis final de su carrera realizando el diseño y producción de un equipamiento para niños con movilidad reducida. El tenía algunos prototipos hechos y con los kinesiólogos y terapistas fue charlando para idear el bipedestador que tiene un control que le permite al niño dirigirse hacia donde quiere ir”, refirió la jefa del Servicio.
En relación a la importancia de este diseño, señaló que en los procesos de rehabilitación la bipedestación es “una etapa muy importante” por cuanto permite mejorar funciones respiratorias, digestivas; optimizar el desarrollo óseo y alinea al niño permitiéndole tener otra mirada. “Siempre bipedestamos en alguna instancia de la rehabilitación y lo hacíamos con bipedestadores estáticos”, señaló y remarcó que “este desarrollo es completamente diferente porque a la bipedestación se le agrega la posibilidad del desplazamiento con un esfuerzo mínimo para el niño, lo que hace que el proceso sea mucho más atractivo, además de favorecer su desarrollo cognitivo y emocional”.
Los primeros usos
El equipo fue recibido el pasado viernes en un acto realizado en el Servicio de Rehabilitación y desde entonces se puso en funcionamiento para ir haciendo los ajustes necesarios para optimizar su funcionalidad en cada caso particular. “La verdad es que estamos muy contentos, porque además es un equipo muy seguro y construido con buenos materiales”.
“El uso se va planificando según las necesidades de cada paciente y en función de la instancia de su rehabilitación en la que se encuentren y la idea es poder reportar estas primeras experiencias a Alejandro que fue el desarrollador de esta idea. El nos ha pedido esta devolución porque de esa manera tiene insumos que pueden servirle para modificar lo que resulte necesario de cara a que en un futuro este elemento pueda ser desarrollado a otra escala”.
Al respecto indicó que “hay cuestiones como la sensibilidad del control de movimiento o la velocidad que se podrán ir modificando en el uso concreto. Estos diseños tienen sentido si se usan en lugares donde hay profesionales que puedan ir monitoreando la seguridad y evaluando otras cuestiones en un proceso de rehabilitación”. En relación al mantenimiento del equipo, indicó que es muy sencillo y tiene que ver con el ajuste de baterías y controlar las ruedas.
Diversas patologías
Consultada respecto de las patologías ante las cuales resulta de utilidad un elemento de estas características, Clide Coscia señaló que se puede utilizar en niños con parálisis cerebral, en chicos con lesiones medulares o patologías en las que no pueda usar sus miembros inferiores y tenga alguna funcionalidad en sus miembros superiores”.
Un gesto generoso
La responsable del Servicio de Rehabilitación del Hospital San José aprovechó la ocasión para agradecer el gesto generoso y la sensibilidad demostrada en todo este proceso por el bioingeniero Alejandro Bisi que fue quien diseñó y realizó el bipedestador para rendir su tesis final de grado y luego lo donó al Servicio para el trabajo con niños.
