Marilyn Calvigioni: “Mi sueño es y será, hasta que lo logre, vivir del teatro”

Radicada nuevamente en Pergamino desde hace casi un año, formó parte de dos exitosos proyectos: “¡Jettatore!” y “Cerca”, esta última volverá a escena en abril. Para este año prepara dos estrenos: “La aventura del hombre” y “La señorita Julia”, el primero como asistente de dirección y el segundo como codirectora y actriz.

“Mi sueño es y será hasta que lo logre vivir del teatro”, afirmó a LA OPINION Marilyn Anahí Calvigioni, quien desde hace casi un año se encuentra nuevamente radicada en Pergamino.

“Viví 14 años en Buenos Aires siempre haciendo teatro”, agregó la Actriz Nacional, egresada en 2011 de la Escuela Metropolitana de Arte Dramático donde además cursó dos años el profesorado. “Ahora estoy haciendo el tramo pedagógico virtual para poder titularizar horas de Teatro en escuelas locales”, sostuvo aunque aclaró que ya ha dado clases varios años en diferentes escuelas de Pergamino en 2013, 2014 y 2015. Este año estuve también dando clases en Colón”.

Pergamino la conoció en los últimos meses en su rol de asistente de dirección y del personaje de mucama en la exitosa puesta de “¡Jettatore!”, de Gregorio de Laferrere, dirigida por Jorge Sharry y en la comedia “Cerca”, de Eduardo Pavlovsky, bajo la dirección de Jorge Abal.

“Estoy muy contenta con la respuesta del público y con todo lo que pude hacer en un año, porque llegué sin ninguna idea y terminé estando en dos obras exitosas. Fue un placer trabajar con los dos directores (Sharry y Abal), lo mismo que con el elenco de ‘¡Jettatore!’, con ‘Lalo’ Bonacalza y Carmen Rolandelli”, sostuvo.

Anahí, como le gusta que la llamen, adelantó que ya se encuentra trabajando en dos nuevos proyectos. El primero, como asistente de dirección de la obra “La aventura del hombre”, escrita por Marcelo Saltal, -otro talentoso teatrista local radicado en la Ciudad de Buenos Aires-. “El se va a instalar en Pergamino el verano para poder trabajar a fondo y estrenar en marzo”, indicó.

La pieza escrita por el pergaminense tendrá como actores a Claudio Angelozzi y Javier Juhant, la misma dupla que tiempo atrás protagonizara “Historia del zoo”, de Edward Albee, dirigidos por Calvigioni. “Además de ser amigos les vienen excelentes los personajes que les tocan interpretar en la historia -señaló-. La obra, que será estrenada en marzo en la nueva sala de Habemus Theatrum, contará con la colaboración de Jorge Sharry.

El otro proyecto en el que Calvigioni se encuentra trabajando con el objetivo de estrenar en agosto, es la realización de la puesta en escena de la obra de teatro realista “La señorita Julia”, escrita en 1889 por August Strindberg. “La idea es de Jorge Sharry. Yo lo voy a dirigir a él y él me va a dirigir a mí, y ambos dirigiremos el proyecto. Así que vamos a actuar y dirigir. Por ahora el elenco no está formado porque esto es muy nuevo”, aclaró.

La trayectoria

Anahí viene precedida por una importante trayectoria en Buenos Aires y en Rosario donde integró el elenco de la Opera Rigoletto, el gran clásico de Giuseppe Verdi, con dirección escénica de Pablo Maritano. “Fue un espectáculo maravilloso. Ahí estuve como figurante pero bastante central”.

En Buenos Aires tuvo un rol protagónico en la obra “Federico García Lorca, poeta en Buenos Aires”, de Patricio López Tobares. “Con esta obra nos fue muy bien en Buenos Aires e hicimos una gira por Córdoba. Ahí hacía seis personajes y era la única mujer”, sostuvo.

También protagonizó durante seis meses en el Teatro del Pueblo la exitosa obra de Roberto Arlt, “El fabricante de fantasmas”, dirigida por Patricio López Tobares. “El personaje principal lo hacía mi mejor amiga Jessuina Vigilante, con quien -paralelamente- estábamos ensayando ‘Bodas de sangre’ y se quebró la muñeca -contó-. Así que esa misma noche me aprendí la letra de toda la obra y al otro día fui y estrené, y la hice durante seis meses. Ella había tenido una sola función con ‘El fabricante de fantasmas’, que venía ensayando desde hacía dos años”.

Calvigioni estudió dirección con Carlos Ianni, director del Celcit y director adjunto del Instituto de Estudios Teatrales para América Latina, y seminarios con el maestro de actores Agustín Alezzo. También en el Teatro San Martín, en el Teatro Rojas y en la Escuela de Formación Actoral de Néstor Romero en San Telmo.

“Estuve 14 años estudiando en todos lados, siempre tratando de perfeccionarme”, sintetizó.

- Uno estudia con un objetivo, ¿cuál es el tuyo?, ¿la docencia o interpretar alguna obra o un rol en especial?

- Mi sueño es y será hasta que lo logre vivir del teatro. En la docencia descubrí un mundo nuevo que me encanta. Me parece súper valioso que los niños y adolescentes tengan teatro en las escuelas. El teatro es muy sanador, conecta, genera vínculos y deja que los chicos se expresen. Dar clases no era algo que había pensado. Siempre quise vivir del teatro pero actuando. Ahora lo estoy fusionando con el profesorado porque de algo hay que vivir (risas), y lamentablemente el teatro no es muy redituable, pero espero que algún día lo sea. Sueño con eso y no voy a bajar los brazos de pensar que algún día voy a vivir de eso.

- En Pergamino hay mucha actividad teatral, ¿cuál es tu impresión?

- Me parece maravilloso que estén todos los teatros ocupados, que se generen nuevas salas, que haya muchos grupos, también que esté el Profesorado de Teatro para que estén formados los que vayan a formar.

Más allá de que cada teatro tiene su público, me parece que la gente se está enganchando cada vez más con ver y hacer teatro, que es tan lindo. Es muy sanador para aquel que quiera, para liberarse, para entretenerse, para conectarse; el teatro te genera todo eso. También está bueno que haya talleres para todas las edades.

Los comienzos

Anahí hizo sus primeros pasos con el teatro junto a Ricardo Padilla (fallecido). Después pasó a la Escuela de Bellas Artes donde Juan Carlos Caruso coordinaba un taller de teatro.

En 2003 formó parte del elenco de la puesta “El médico a palos”, de Moliére, que dirigió Juan Carlos Puppo, con Nelson Carini y Raúl Notta.