El saltense César Meli es seguido por Torino e Inter

César Marcelo Meli, el futbolista de 22 años de la vecina localidad de Salto, se transformó en pocos partidos en principal figura de Boca Juniors y sobre la base de su entrega y sacrificio se ganó el cariño de la gente. Fue quizás, de los que llegaron a mitad del año pasado, el refuerzo que menos expectativas generaba en propios y extraños del Mundo Boca. Y si bien Carlos Bianchi no le dio lugar -sólo jugó 45 minutos contra Estudiantes, en el último partido del entrenador que sería despedido horas después-, Rodolfo Arruabarrena le permitió transformarse en pieza clave.

Su rendimiento llamó la atención del Torino de Italia, que lo viene siguiendo de cerca desde hace algunos meses. Pero en los últimos días también llamó la atención de Roberto Mancini, técnico del Inter, quien se comunicó con gente cercana al futbolista para hacer saber su deseo de contar con él.

Meli estuvo estos días en su ciudad natal, aprovechando el descanso junto a su familia y en ese breve lapso se reunió con el técnico pergaminense Daniel García, que durante 2008 le hizo un seguimiento especial para que al año siguiente se incorporará al Club Jorge Bernardo Griffa, donde fue compañero de Franco “Turu” Flores, jugador de Argentinos Juniors y cedido a préstamo a Douglas Haig, que precisamente también llegó a Griffa por recomendación de García.

Luego, el Club Jorge Bernardo Griffa lo dio a préstamo a Colón de Santa Fe y tras un recorrido en inferiores, el técnico Roberto Sensini, que lo conocía de Griffa, lo hizo debutar en primera división a fines de 2012. En Colón disputó 34 partidos y aunque el sabalero descendió de categoría, Meli fue una de las revelaciones de la temporada y le alcanzó para que Boca Juniors pusiera los ojos en él.