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El recital del cantante y compositor santafesino fue el sábado 19 de agosto de 2000 y LA OPINION publicó la crónica del espectáculo el martes 22. El salón lució completo y con público de todas las edades. El oriundo de Cañada Rosquín tocó sus principales temas.
El 19 de agosto de 2000 y luego de más de una década sin presentarse en nuestra ciudad, León Gieco cantaba en el Club Fomento Centenario y se llevaba una enorme ovación del variado público pergaminense. El recital fue el sábado 19 y LA OPINION redactó la crónica del espectáculo el martes 22.
LA OPINION, 22 de agosto de 2000
León tocó todo, todo, todo. Llegó tranquilo, sereno, casi sin inmutarse ante la ovación del público de todas las edades que se hizo presente en las instalaciones de Fomento Centenario para verlo. Sacó una de las más de diez armónicas que tenía en una cartuchera en la cintura, probó el tono, después tomó su guitarra, la pulsó y comenzó un recital que se extendió hasta la madrugada del domingo.
Así comenzó el espectáculo que brindó León Gieco ante un importante número de asistentes que hacía muchos años que no veían y escuchaban al santafesino en vivo en nuestra ciudad; fue tal vez por eso que este músico, cantor y compositor después de tocar dos temas dijo: “Como hace mucho tiempo que no vengo por acá, esta noche vamos a cantar todo”, y el público estalló, sin ser esa una frase o una actitud demagógica para conseguir aplausos ya que el oriundo de Cañada Rosquín es conocido y admirado por ser consecuente con sus palabras, lo cual no es poco.
En un principio-hecho que se manifestó durante todo el recital- León le explicó al respetuoso auditorio compuesto por diversas generaciones, acerca de que el primer bloque musical comprendería una parte acústica y el segundo una parte eléctrica, momento en que llamó a los integrantes de la banda conformada por “Tancredo”, Marcelo García, Luis Gurevich, Eduardo Rogatti y Aníbal Forcada, quienes lo acompañaron a lo largo de la noche con los más diversos instrumentos con los que recorrieron temas de los 30 años de su carrera musical, y entre los que no faltaron los ya clásicos como “En el país de la libertad”, tema que usó una marca de teléfonos celulares para su publicidad.
Más sobre el recital
Durante su actuación en Pergamino, León Gieco logró que en cada tema se produjera un clima especial, desde la alegría a la nostalgia, pasando siempre y en cada verso por la reflexión, llegando tanto a los jóvenes como a personas de 40 ó 50 años de edad que en varias ocasiones vieron el recital con los ojos empañados de lágrimas y recuerdos. Pero tampoco faltó el tiempo de saltar y bailar con temas como “Ojo con los Orozco”, “Pensar en nada”, “La cultura es la sonrisa”, “Guantanamera” y “Los Salieris de Charly”.
El intervalo no sólo sirvió para permitir descansar a los músicos sino también para vender remeras con la emblemática guitarra fileteada, símbolo del último disco “Orozco”, y el libro de la vida de Gieco “Crónica de un sueño”. A lo largo del recital no faltaron temas como “Cachito campeón de Corrientes”, “El fantasma de Canterville”, “Cinco siglos igual”, “El señor Durito y yo” - que pertenece al disco que se hizo en beneficio de Chiapas- “Halleluja” (Aleluya) y “Mensajes del alma”, entre otros temas de su vasta carrera.
Después de más de una década sin presentarse en Pergamino, León Gieco volvió, y con renovadas ganas de regresar ya que su actuación fue todo un éxito y el público respondió como para que eso suceda.
