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La Federación Cardiológica Argentina lanzó a través de redes sociales una campaña para promover hábitos saludables en niños y adolescentes, y así prevenir factores de riesgo que pueden afectar la salud cardiovascular en la vida adulta. Los especialistas advierten que muchas de las dietas actuales, basadas en comida chatarra y productos industrializados, junto con hábitos sedentarios de los chicos tendrán una incidencia directa en la salud de la población en los próximos años.
La campaña se realiza bajo el lema “Hablemos del corazón de los niños” y tiene como objetivo llamar la atención de las familias y de la comunidad educativa para promover una alimentación más sana y alentar la realización de actividades físicas en los chicos, sobre todo en estos tiempos en los que pasan muchas horas sentados frente a la pantalla del televisor, la computadora o el celular.
Según la entidad, el 44 por ciento de los casos de diabetes que se registra en el país, el 23 por ciento de las cardiopatías isquémicas y buena parte de del resto de las enfermedades no transmisibles, incluyendo algunos casos de cáncer, son atribuidos directamente a los trastornos metabólicos causados por la obesidad y el sobrepeso, que en la Argentina afecta a más del 60 por ciento de la población adulta y casi al 10 por ciento de niños y adolescentes. Se trata de un problema al que debe prestarse atención, ya que las estadísticas revelan que el número de estas enfermedades va en aumento.
Con respecto a la obesidad infantil, los especialistas advierten que no se trata solo de un problema estético, sino que se trata de una cuestión que pone en riesgo la salud de los más pequeños. En Argentina, además, se da el mayor porcentaje de obesidad infantil en niños menores de cinco años de toda América Latina. Se estima que uno de cada tres niños en edad escolar tiene sobrepeso u obesidad, mientras que uno de cada cinco niños y adolescentes no completan la recomendación de actividad física diaria. Hay más datos: según la Federación Cardiológica Argentina, más de la mitad de los chicos que tienen entre 13 y 15 años pasa más de tres horas por día sin realizar actividades físicas.
Frente a este panorama, la campaña propone alentar a los chicos a realizar actividades físicas periódicas, y a llevar una dieta saludable, abundante en fibras, vegetales, frutas, cereales y lácteos descremados, evitando productos procesados, altos en sodio y grasas saturadas, y dejando de lado los azúcares simples refinados, como las harinas.
En ese sentido, se advierte que el rol de la familia es fundamental para que el niño aprenda buenos hábitos desde pequeño, y por eso es importante que los adultos ayuden a los chicos a elegir alimentos saludables y evitar la ingesta de productos elaborados y bebidas con altos contenidos de azúcar, grasas y sal.
Las cifras aportadas tanto por la Federación Cardiológica Argentina como por otras instituciones y organismos oficiales de nuestro país muestran que se trata de un problema de salud pública y de ahí la importancia de promover campañas de concientización para que los niños tengan acceso a alimentos saludables en el hogar, y que se evite el consumo de ultraprocesados, azúcares y gaseosas. Lo ideal es que la comida sea variada y, en lo posible, preparada por la familia en el hogar. La adopción de hábitos saludables contribuirá a mejorar la educación nutricional de los chicos y, en ese sentido, las escuelas y los docentes también deben desempeñar un papel fundamental en la lucha contra la obesidad. En el ámbito escolar deben promoverse los kioscos saludables, como ya existen en varios establecimientos educativos, pero todo este esfuerzo debe ir acompañado de un cambio de hábitos en los hogares. Está demostrado que en el entorno familiar el papel de los adultos es fundamental en la educación nutricional de los niños, de manera que es de esperar que las familias tomen conciencia del enorme esfuerzo que deben realizar para hacer frente a la obesidad y el sobrepeso en la infancia, que hoy es considerado uno de los problemas sanitarios más serios por la Organización Mundial de la Salud.
Por eso es necesario que se replantee el tipo de alimentación que predomina en la mayoría de los hogares del país, y se destaque la importancia que tiene cumplir en los hogares con un plan de alimentación más nutritivo y menos hipocalórico.
