Martínez: “Nos comprometemos a seguir transformando Pergamino”

“Tengo la responsabilidad de contarles a mis vecinos qué hemos hecho en estos años y qué queremos hacer si nos toca un segundo mandato”, plantea el intendente como sustento de su campaña, a la vez de esta convencido de que “la comunidad de Pergamino ha comprendido el desafío, valora todo lo que hemos logrado juntos y comprende que queda mucho por seguir trabajando”.

El actual intendente Javier Martínez, que va en busca de su reelección, dialogó con LA OPINION a falta de una semana para las elecciones Primarias.

Habló del escenario político local y nacional, de las fortalezas y asuntos pendientes de su actual gestión, de cómo asume las críticas y de los ejes de su nuevo mandato en caso de ser reelegido en octubre, entre otros temas.

-¿Qué análisis hace del escenario político?

-Entiendo que vivimos una época de grandes definiciones acerca del modelo de país que queremos vivir. En ese sentido, los partidos políticos intentan expresar ese rumbo y en lo local, se pone de manifiesto esta cuestión.

Un oficialismo que va rumbo a las Paso sobre la base de la compresión de una agenda que tiene diferencias, pero muchas más coincidencias consolidando a las fuerzas que componen el frente (UCR, PRO, Coalición Cívica, Partido Fe, Peronismo, etcétera) y por el otro lado una interna del Frente de Todos que probablemente por un problema de identidad, se ha fraccionado en muchas líneas internas.

Nosotros creemos que la comunidad de Pergamino ha comprendido el desafío; y en ese sentido valora todo lo que hemos logrado juntos y también comprende que queda mucho por seguir trabajando.

-¿Qué cree que está en juego en este turno electoral?

-Como decía anteriormente, tenemos en juego el modelo de país, de sociedad, de futuro. Eso necesariamente nos ha llevado a una polarización mal llamada grieta que nos tiene a muchos preocupados a veces por el nivel de violencia que se ve en los medios; los escraches y las famosas noticias falsas o “fake news” que invaden a veces las redes.

Nos jugamos un país abierto al mundo, con ganas de progresar, con intenciones de adaptarse a los tiempos que corren, pero por sobre todas las cosas un país que podamos llamar previsible. Algo que personas de mi generación no lo habíamos podido vivir en carne propia. Con estadísticas creíbles, especialmente cuando son negativas para el gobierno de turno, con respeto a la ley, con persecución irrestricta a la corrupción y al narcotráfico y por sobre todas las cosas hablando con la verdad y teniendo en cuenta que lo que nos une son los valores.

Esto es lo que está en juego. Y en nuestra ciudad la lógica es la misma.

-Durante su gestión se hicieron muchas obras, eso es innegable. ¿Qué otra fortaleza cree que tuvo y dónde cree que tiene materias pendientes?

-Creo que tuvimos fortalezas en muchas áreas y muchas veces esas fortalezas se ven representados con una obra; así, por ejemplo, la transformación que hemos realizado en materia de inclusión es importantísima. Porque hemos concentrado obras en los sectores postergados, llevando la ciudad a donde ya no había ninguna presencia del Estado, porque entendimos que la renovación más importante en los Caps, el Hospital y esa obra magistral del Centro Oncológico no es para que se vanaglorie un intendente, eso es inclusión. Porque acercamos más y mejor calidad de servicios a quienes antes no los tenían. Y por supuesto, sin punteros.

Otra gran fortaleza ha sido el proceso de modernización del Estado que hemos iniciado. Porque no se trata sólo de acercar el Estado al vecino con herramientas informáticas más transparentes y rápidas. Se trata de darle un dinamismo a la gestión que no lo tenía, reducir los tiempos en trámites y desburocratizar procesos. Nuestro sistema de gestión de proyectos, el expediente digital, la Infraestructura de Datos Espaciales, la Evaluación Médica Deportiva, la app del 147, el “Cuándo llega” para los colectivos o el sistema Unico para las prestaciones de servicios sociales; son todos desarrollos propios que hoy son modelo en el país. Y así continuaremos con una docena de nuevos desarrollos, llevando nuestra gestión a los mejores puestos de los ránkings nacionales.

Y por supuesto que hay materias pendientes, muchas. Porque hemos logrado una gran cantidad de cosas, pero no hemos llegado a todo ni a todos. En cuestiones de seguridad, infraestructura urbana, más eficiencia en la gestión pública y cuestiones que hacen a un régimen de asistencia a la producción adaptado a los tiempos que corren, son algunas de las materias pendientes. Todas iniciadas, pero necesitan de un proceso más profundo y sostenido en el tiempo.

Así, por ejemplo, la definición de nuestra identidad como Partido, dentro de un ecosistema agroindustrial que contiene mayormente a la industria metalmecánica y al sector de la confección aparte del agro, define una agenda muy importante de trabajo en términos de definición de mercados, socios estratégicos regionales y elementos centrales para trabajar nuestra cadena de valor. ¿O quién iba a pensar hace al menos un par de años que ahora estamos produciendo energía con los residuos del campo? Ese tipo de iniciativas se tienen que multiplicar, creando más y mejor empleo privado de calidad.

-Desde algunos sectores opositores cuestionan que hay obras innecesarias…

-Una obra innecesaria conlleva un prejuicio en el título de quien lo dice. Para un artista no será una obra innecesaria el nuevo Centro de Bellas Artes, para quien vivía postergado no será innecesario su cordón cuneta, a quien disfruta de la ciudad no le parecerán innecesarias las transformaciones del área central, quien ha padecido en persona o con un pariente el cáncer no le parecerá innecesaria la obra del Centro Oncológico, quien perdió todo en una inundación no le parecerá innecesaria la construcción de una represa y quien haya tenido un accidente en la ruta Nº 8, por supuesto no le parecerá innecesaria la nueva autopista.

Por eso cuando alguien dice que una obra es innecesaria, es porque carece de sensibilidad de a quién o quiénes puede ayudar o atender una problemática específica; y por supuesto que el intendente es el que toma buena parte de estas decisiones. Pero de eso se trata ser el responsable. Alguien, al final termina poniendo en agenda todas las obras; aunque algunos las consideren innecesarias.

-¿Cómo se siente más cómodo, interpretando al pergaminense y actuar en consecuencia o prefiere aplicar su impronta y que se la acepten?

-Es difícil responder esa pregunta. Porque me considero un pergaminense de pura cepa. Creo que mi impronta responde a ese sentir popular del vecino que le duele cuando se destruye el mobiliario público, cuando no se hace el trabajo que se prometió, o cuando nos hacían ilusionar con cosas que no eran posibles.

Entiendo que no soy un político de los de antes, con eso que parecía una condición especial; llámese cintura política, porque tengo poco filtro, porque no he dejado de ser pergaminense.

Pero como intendente, entiendo que hay mejores gestores que otros. Hay ciudades que he visto progresar más rápido que otras; y es allí donde veo cosas que me gustaría hacer acá. Si eso es una impronta, creo que el modelo de la ciudad de Buenos Aires, conceptualmente, es una guía para seguir dentro de nuestras posibilidades.

-¿Cómo se siente cuando lo critican?

-En general, las críticas constructivas las recibo bien, porque entiendo que no somos infalibles y es una buena forma de darnos cuenta cuando cometemos algún error. Lo que a veces no comparto, y probablemente sea porque no termino de entender algunas cosas de la política, son las mentiras. Mentiras en forma de crítica. Porque el vecino en general confía de sus dirigentes, pero buena parte de la vieja política miente sistemáticamente como forma de generar voluntades. La mentira no es una buena consejera y se ha transformado en casi la única forma de construcción política de algunos sectores de la oposición.

-¿Cómo cree que se compone su voto?

-Entiendo que gran parte de mi votante es un pergaminense promedio. Un laburante. Alguien que sabe que las cosas cuestan. Así somos en gran mayoría los pergaminenses. No es un tema generacional, es un tema de valores. El valor de la palabra, del compromiso, de la verdad y del esfuerzo.

Jóvenes con ganas de progresar, adultos que quieren una ciudad donde sus hijos no se vayan, que se queden; y adultos mayores que disfrutan de nuestros parques, de nuestras actividades y de nuestro sistema de salud.

Yo no me animo a decir ni qué porcentuales ni qué segmentos de la sociedad son los que me votan a mí. Porque nadie es dueño de sus votos. Nunca creí en eso. Entiendo que la sociedad valora el trabajo de uno en un momento; y en otro, se ve en la obligación de jubilarnos. Esa es la ley principal de la política. Ser el vecino que personifique la necesidad de su comunidad en un momento determinado.

-Si fuera reelecto, ¿habrá cambios en la estructura municipal?

-Creo que no hacer cambios es negar el tiempo en que vivimos. Siempre hay que poner a la gestión al servicio de los desafíos que tenemos.

En agosto ya comenzamos con la proyección de proyectos y programas para el año 2020 y en ese sentido, trataremos de adaptar la estructura para ejecutar estos nuevos desafíos.

Soy de los que creen que las áreas no deberían definir a las personas ni las personas a las áreas. Trataremos de adaptar nuestra estructura para seguir consolidando un equipo de trabajo homogéneo y con ganas de poner toda la dedicación como desde el primer día.

En consecuencia, creemos que tenemos que flexibilizar áreas pensando en un trabajo conjunto con vecinos y tener en cuenta que el Estado no puede hacer todo solo.

-¿Cuál podría ser el eje de su nueva gestión?

-Nuestro principal eje seguirá siendo el vecino. No hay política pública que no tenga en cuenta al vecino como beneficiario.

Es probable que en esta etapa tengamos que hacer un mayor esfuerzo en nuestra identidad como Partido. Consolidando así nuestro modelo productivo, nuestras necesidades de infraestructura y nuestras herramientas municipales para que cada pergaminense pueda progresar.

Durante toda mi gestión mantuvimos cinco ejes de gestión generales: un Pergamino seguro, una ciudad inclusiva, una administración moderna, un Pergamino planificado y sustentable y una producción agroindustrial.

Es probable que tengamos una fuerte impronta de modelo de ciudad saludable; entendiendo que el espacio público es el principal beneficio que cualquier pergaminense puede disfrutar a cambio de vivir en nuestra ciudad. Prueba de ello, es el proyecto de nuestro nuevo Parque Belgrano.

-¿Se imagina gobernando sin Vidal como gobernadora o sin Macri presidente, o sin ninguno de los dos?

-No imagino ese escenario. Porque entiendo que eso no va a suceder. Como decía al principio, se define un modelo de país; y los argentinos no queremos volver atrás.

-Usted debe estar convencido que ganará y seguirá siendo intendente. Pero si le tocara no ganar ¿imaginó cómo continuaría su vida?

-No estuve convencido de ganar en 2015. No debería estar convencido ahora. Tengo la responsabilidad de contarles a mis vecinos qué hemos hecho en estos años y qué queremos hacer si nos toca un segundo mandato.

Si no me toca seguir, seguiré con mi profesión de abogado. Como corresponde. No vivía de la política y no pretendo vivir de ella.

Pero, si los pergaminenses vuelven a confiar en nuestro equipo de trabajo, nos comprometemos a seguir transformando Pergamino.