“El gobierno de la Argentina no estuvo involucrado” en la muerte del fiscal, dijo Timerman

“Nadie quería más que el señor Nisman viviera y contestara las preguntas que la presidenta y yo”, sostuvo el canciller ante una cadena internacional de noticias. Capitanich volvió a ratificar que la denuncia presentada por el fallecido “no tenía consistencia”. 

Buenos Aires, (NA) - El canciller Héctor Timerman aseguró ayer que tanto él como la presidenta Cristina Kirchner esperaban que el fiscal “viviera y contestara las preguntas sobre su denuncia” contra ambos por supuesto “encubrimiento” a Irán en la investigación del atentado a la Amia.

El jefe de la diplomacia argentina se pronunció así en una breve charla telefónica que mantuvo con un presentador de CNN en el marco de un programa especial que emitió la cadena internacional de noticias sobre el caso que conmociona a la Argentina.

“El gobierno de la Argentina no estuvo involucrado. Además, nadie quería más que el señor Nisman viviera y contestara las preguntas que la presidenta y yo”, sostuvo Timerman luego de que el entrevistador le preguntara si el Ejecutivo había estado detrás de la muerte del fiscal.

Por su parte, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, rechazó que el Gobierno haya cambiado su posición con respecto a la muerte de Nisman, desde la hipótesis del “suicidio” a la del “asesinato”, mientras que el secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, planteó que el fallecido fiscal “no” fue quien escribió la denuncia.

Capitanich afirmó que en la primera de dos notas que Cristina Kirchner publicó al dar su posición sobre la muerte de Nisman utilizó la palabra “suicidio” escrita entre signos de interrogación, mientras que en la segunda, la jefa de Estado dijo que no tenía “pruebas” pero que consideraba que no fue un suicidio.

En declaraciones formuladas en la Casa de Gobierno, el gobernador de Chaco, en uso de licencia, dijo que en el Gobierno “ha primado la prudencia con respecto a la formulación de las hipótesis”.

Por otra parte, volvió a afirmar que la denuncia de Nisman por presunto encubrimiento contra la Cristina Kirchner y Timerman “no tenía consistencia”.

“Calificados penalistas han determinado que (la denuncia) no tenía pruebas, la producción de pruebas era inconsistente. Establecía una opinión sin tener principio de ejecución, no tenía consistencia”, subrayó.

En tanto, Aníbal Fernández aseguró que el escrito presentado ante la Justicia, acusando a la presidenta de proteger a iraníes investigados por el atentado a la Amia, “no puede haber sido escrito” por el fallecido fiscal Nisman.

“Yo se que era un hombre formado y con experiencia en el derecho, no puede haber escrito esa burrada”, manifestó Fernández, temprano por la mañana, al arribar a la Casa de Gobierno.

E insistió: “(Nisman) no puede haberlo escrito con lo cual es totalmente claro que no tiene nada que ver con eso”.

Asimismo, Fernández arriesgó una hipótesis sobre un entorno del fiscal que lo obligó a realizar esa presentación como así también a regresar de forma anticipada de las vacaciones que compartía en Europa con su familia.

“Hay alrededor alguien con intereses de otras características. Les servía primero vivo para presentarla (la denuncia) y después seguramente les servía muerto”, expresó.

Y concluyó: “Desgraciadamente el fiscal esta muerto y no por una casualidad sino que esta ligado a la misma razón por la cual lo hicieron venir (desde Europa), a la misma razón que lo hicieron presentar una denuncia de esas características”.