La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, y su nieto Guido, a quien recuperó tras 36 años de búsqueda, llegaron ayer a Quito, donde fueron recibidos por el presidente Rafael Correa, antes de viajar a las Islas Galápagos.
El canciller ecuatoriano Ricardo Patiño explicó que Correa decidió invitarlos al país y, en particular, a las islas Galápagos para que tuvieran un momento de descanso y tranquilidad.
Próxima a cumplir 84 años, Carlotto, una emblemática dirigente defensora de los derechos humanos, y su nieto Ignacio Guido Montoya, llegaron ayer a la sede presidencial, donde fueron recibidos por Patiño y Correa.
Carlotto recuperó en agosto al hijo de su hija Laura, asesinada por la dictadura (1976-1983), que fue arrebatado de los brazos de su madre horas después de haber nacido en un centro clandestino de detención. Según un informe de la agencia de noticias, la abuela y su nieto intercambiaron regalos con Correa antes de sostener un encuentro privado: Carlotto entregó al mandatario ecuatoriano una camiseta de la organización que preside, mientras Guido le dio un CD de su música.