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En Pergamino fue un referente de la cultura y el deporte. En su fructífera vida sobresalió por ser deportista, dirigente, periodista, escritor y poeta. Por donde pasó dejó una estela de alegría, de optimismo y de fe.
Una de las tantas particularidades y características de Don Ricardo Piraccini al ingresar a la redacción del Diario LA OPINION, era mirar un cuaderno agenda -celosamente guardado en el primer cajón de su escritorio- para saber quién cumplía años ese día.
Es que Don Ricardo tenía muchos amigos y conocidos para saludarlos o en su defecto para recordarlos en una breve nota que encabezaba: “Hoy hubiera cumplido años el amigo…”.
Hoy lo recodamos de la misma forma. Hoy, 26 de abril, Don Ricardo Ismael Piraccini hubiera cumplido 100 años.
En Pergamino fue un referente de la cultura y el deporte. En su fructífera vida sobresalió por ser deportista, dirigente, periodista, escritor y poeta. Por donde pasó dejó una estela de alegría, de optimismo y de fe.
Nació en el pueblo de Viña y de muy chico comenzó a trabajar en la imprenta y librería Solari.
Fue un reconocido pugilista. Realizó más de 120 combates -con escasas derrotas- enfrentó a los boxeadores más cotizados del nivel nacional y una media docena de veces pisó airoso el ring del mítico Luna Park.
Intimamente conmovido por la muerte del boxeador Justo Suárez, su admirado “Torito de Mataderos”, el 10 de agosto de 1938, Ricardo hizo para LA OPINION su primera nota periodística. Desde entonces escribió para el Diario y otros medios. Así desarrolló su estilo, conocido y valorado, pese al disimulo de varios pseudónimos.
Ingresó como periodista efectivo en LA OPINION el 15 de enero de 1979, y a través de las páginas del Diario oficializó el Dhon D. Antes, con el que firmaba la sección “Ventanas del Pergamino Viejo”, tan esperadas por infinidad de lectores durante años.
Ricardo Piraccini también sobresalió como poeta y escritor. Su primer libro, de prosa y poesía, lo escribió en 1942 y se llama “Recuerdos y recuerdos”. Después editó otros, como “Testimonios del recuerdo”, “Ni fruto ni semilla”, “Aroma a yuyo”, “No todo es malo” y “Mientras llega el olvido”, entre otros. También escribió la Historia del Club Sports y la Historia de la Liga de Fútbol de Pergamino.
El 20 de octubre de 1976 presidió en su propio domicilio la reunión constitutiva del Grupo Literario Hojarasca.
Ricardo Ismael Piraccini falleció el 26 de julio de 2011. Tenía 92 años.
