A los 89 años falleció este martes Carlos Horacio Comitté

Fue docente y rector del Instituto Comercial Rancagua; también un eximio basquetbolista pero siempre asimilando el deporte a la docencia, su auténtica e inamovible vocación.

Carlos Horacio Comitté, profesor desde 1962 en el Instituto Comercial Rancagua (ICR), accedió a la rectoría del establecimiento en el año 1967 ejerciendo ese cargo por más de tres décadas con notorio beneplácito.

Fue además un eximio deportista, pero siempre asimilando el deporte a la docencia, su auténtica e inamovible vocación.

Comitté cursó estudios en la Escuela Normal y en tercer año pasó al Nacional “Almirante Brown” hasta culminar con el secundario.

A los 31 años coronó su magisterio e hizo los cursos de profesorado en el Normal, de Historia y Literatura. Formó así parte de la primera promoción de profesores.

Comenzó su labor docente como profesor de Educación Física en el Instituto Comercial Rancagua. Previamente había sido preceptor en la Enet Nº1, a las órdenes de Italo Conti.

Ya en el Instituto obtuvo las cátedras de Literatura e Historia. En 1965 hizo una suplencia de la Rectoría, pasando a ser rector titular en 1967.

Desde 1953 hasta 1967 trabajó como auxiliar administrativo de contaduría en el Correo de Pergamino, al mismo tiempo que ejercía sus cátedras y oficiaba como entrenador de básquet en el Club Sirio Libanés, donde creó la división de cadetes, siempre en tren de docencia y formación.

Comitté dejó su sello en el ICR y, con los años conformó un ejemplo, una ínsula dentro del panorama educativo zonal.

“Mi lema ha sido siempre: no interesa si un alumno seguirá estudiando, o manejando un tractor en el campo de sus padres, lo importante es que lo haga con la cabeza llena de conocimientos y una conducta excelente”, decía en nuestra sección Perfiles Pergaminenses en el año 1993.

“El Instituto ha fortalecido su andar; ha mejorado el nivel de enseñanza; ha adquirido un equilibrio en la comunidad educativa y ha logrado el reconocimiento de sus pares, de sus superiores y de toda la población de Pergamino”, agregaba.

Comitté también sobresalió como jugador de basquetbol. “Fue para mí una pasión, como lo es hoy mi tarea en el Instituto”, decía el docente quien mientras desarrollaba sus actividades como jugador se inclinó ppor hacer docencia en el básquet.

Tuvo a su cargos las divisiones inferiores de los clubes donde jugaba (Sports, Comunicaciones y Sirio Libanés).

“Cuando fui director de básquet me preocupé por la enseñanza de la técnica pero al mismo tiempo a través de mis consejos y palabras a que cada uno de los chicos formara su carácter y su temperamento, para ser en el futuro hombres de bien.

“Soy un permanente agradecido de este deporte, porque llenó mi vida de grandes amigos, aun entre quienes fueron circunstanciales adversarios”.

Los hermanos Comitté

Carlos Horacio Comitté era hermano de Angel Alfredo “Tito”, músico y director de orquestas típica, jazz y característica, y de Alberto Osvaldo “Chocho”, jugador de basquetbol y director de innumerables equipos de Pergamino y la zona, y Nelly Mercedes.

Ellos marcaron un rumbo en la cultura y el deporte de Pergamino. Además, los varones juntos conocieron el éxito a través de la Orquesta de “Tito” –compartiendo el escenario también con el padre- y jugando basquetbol en Sports, equipo con el que lograron los campeonatos de los años ‘48, ‘49 y ‘50.

Pesar en Rancagua

“Las instituciones construyen su presente a partir de su historia y en la historia del Instituto Comercial Rancagua hay seres fundamentales…Carlos Comitté, sin dudas, uno de ellos”. La comunidad del Instituto Comercial Rancagua acompaña el sentimiento de familiares y amigos, especialmente de su señora esposa, Nora Taylor, y expresa su respetuoso homenaje a quien fue uno de sus grandes líderes.