Nuestro WhatsApp:+54 9 2477 65-4706
Un brote ocurrido en una población de adultos jóvenes, y el aumento en el número de casos, motivó el incremento de la vigilancia. Aunque hay vacuna contra “las paperas”, en los nacidos antes de 1998, la falta de documentación sobre dosis recibidas, complica la investigación.
DE LA REDACCION. A través del Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires se emitió un alerta ante la identificación de casos de parotiditis en territorio bonaerense, con el fin de tomar las medidas necesarias para mantener el control de la enfermedad. En este contexto, desde las áreas de Epidemiología de las distintas regiones sanitarias se solicitó a todas las jurisdicciones extremar la sensibilidad del sistema de vigilancia, la oportunidad y calidad en las medidas de control ante todo caso sospechoso de esta enfermedad.
En Argentina se vacuna contra la parotiditis desde 1998 a los 12 meses y los 6 años (antes del ingreso escolar) y un refuerzo a los 11 años si no recibió las dosis correspondientes junto con las vacunas de sarampión y rubéola, como vacuna triple viral (SRP).
Desde el punto de vista sanitario en las últimas horas se difundieron medidas individuales entre las que se cuentan “no acudir a la escuela o lugar de trabajo hasta nueve días después del comienzo de la enfermedad, aislamiento respiratorio por nueve días” y también medidas ambientales y comunitarias que incluyen “realizar la desinfección concurrente de objetos contaminados con secreciones nasales y faríngeas; extremar medidas de higiene personal; controlar esquemas de vacunación y coberturas según el calendario nacional inmunológico e implementar, si corresponde, vacunación”.
Autoridades sanitarias sugieren “en grupos cerrados evaluar el estado inmunológico y reforzar la vacunación al ingreso a las fuerzas armadas, cárceles, instituciones educativas y clubes con dormitorios”.
Asimismo aconsejan “sensibilizar a los profesionales de la salud acerca de la importancia de la notificación de los casos”.
La parotiditis
Se trata de una enfermedad viral aguda, conocida como “paperas” que se transmite por diseminación de microgotas de Flügge y por contacto directo con saliva de una persona infectada o cualquier objeto contaminado con secreciones. El período de incubación es de 12-25 días y el período de transmisibilidad es de 7 a 14días.
La enfermedad se manifiesta con síntomas precisos, como la tumefacción de una o más glándulas salivales, asociado a fiebre, astenia, dolor de cabeza y mialgias. Entre las complicaciones el paciente puede experimentar sordera neurosensorial.
Son susceptibles de padecer esta enfermedad los niños entre 2 y 12 años que no han sido vacunados o tienen sus esquemas incompletos. Sin embargo, la infección puede ocurrir a cualquier edad y en los adultos presenta cuadros más severos con complicaciones.
Cómo prevenir
El componente antiparotídeo se encuentra incluido en la vacuna Triple Viral (sarampión, rubéola, parotiditis). Además de la inmunización, entre las medidas de prevención y control aparecen: lavarse las manos con agua y jabón, no compartir cubiertos, sorbetes, bombillas, limpiar las superficies que se tocan con frecuencia con agua clorada.
Sin tratamiento
La parotiditis es una enfermedad para la cual no existe un tratamiento específico. Lo importante es consultar al médico en forma inmediata ante la aparición de los síntomas para que puedan tomarse las medidas de control apropiadas.
Como tratamiento sintomático a los pacientes se les recomienda: tomar abundante líquido para mantener la hidratación, consumir alimentos blandos que no requieran demasiada masticación, evitar los alimentos ácidos que estimulen la salivación, reposo absoluto.
Debe sospecharse de la enfermedad ante el comienzo agudo de síntomas con tumefacción (hinchazón) uni o bilateral autolimitada a la parótida u otra glándula salival, de duración igual o mayor a dos días y sin otra causa aparente. La confirmación del diagnóstico se hace mediante un estudio de laboratorio.
Alerta
El alerta epidemiológico emitido por la Dirección de Epidemiología del Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires responde a que desde julio se observa una notificación de casos que aumentó en agosto y se mantuvo hasta el presente, lo que llevó a intensificar la vigilancia en la provincia.
De acuerdo a datos oficiales, hasta el momento se han procesado muestras de 89 casos sospechosos, confirmándose detección del virus en 52 pacientes.
En función de la información epidemiológica disponible, el brote se produjo en una población de adultos jóvenes, con un rango de edad de 13 a 36 años con complicaciones de orquitis (inflamación de los testículos) y meningoencefalitis uraliana en un adolescente.
Los grupos de adultos jóvenes no vacunados (sin vacuna Triple Viral nacidos antes de 1998) son una población susceptible que sostiene la circulación viral.
Desde el punto de vista sanitario, la falta de documentación de las vacunas recibidas es una dificultad importante en la investigación. El aumento de los casos comenzó a fines de agosto, intensificándose en septiembre y octubre.
