Pergamino

Con el humor representó a Pergamino por varias provincias: hoy la calle es su refugio


 Raúl Alberto Del Valle o “El Negro Caro” De triunfar con el humor a vivir en la calle (LA OPINION)

'' Raúl Alberto Del Valle, o “El Negro Caro”. De triunfar con el humor a vivir en la calle. (LA OPINION)

Raúl Alberto Del Valle es un exartista cordobés radicado en nuestra ciudad desde hace 53 años. Es más conocido como "El Negro Caro". Asegura que la situación por la que atraviesa devino por "una elección de vida". También fue pintor de obras y ciclista.


Los pergaminenses que lo encontramos lo llaman "El Negro Caro", pero su nombre es Raúl Alberto del Valle y un exartista cordobés que llegó a la ciudad cuando era muy joven, a los 9 años. Con el tiempo adquirió la pasión por el humor y llevó la risa a varias provincias. También se presentó junto a Juan Nime con el Muñeco Serapio, fue pintor de obras y era amante del ciclismo, pero el destino le deparó la calle. A los 62 años pasa gran parte del día en la Plaza 25 de Mayo y pide monedas en las esquinas para poder sobrevivir. LA OPINIÓN lo entrevistó, accedió a su historia y la delicada realidad por la que transita.

Su arraigo a la ciudad

Los padres de Del Valle eran ferroviarios y desde Córdoba habían sido trasladados para trabajar en Pergamino. Así fue en 1967 "El Negro Caro" pisó por primera vez la "Perla del Norte", una ciudad a la que le guarda afecto. "Pergamino me encanta", dice.

También este exartista arribó a esta localidad del noroeste de la provincia de Buenos Aires cuando la construcción no era frecuente. “Cuando llegué casi que no había edificios y había muchas calles de tierra. Ahora la ciudad cambió un montón, está todo pavimentado, está muy linda. Uno a veces no le da valor a eso, pero en mi época cuando llovía no se podía transitar y si lo hacías, salías todo empantanado ”, le dijo al Diario.

El presente no se asemeja en nada a lo que vivió Del Valle en la época del 70 y 80. “No es que me haya quedado en el tiempo, pero antes se vivía de otra manera, había otras oportunidades. Para mí el celular cambió la historia, la gente anda tonta en la calle, no disfruta de otras cosas”.

La etapa como artista

“El Negro Caro” se considera uno de los humoristas que representan a la ciudad. Llevó la risa a varias provincias, sobre todo las norteñas. “Empecé a los 12 años a ser de payaso, me gustaba mucho trabajar con el humor, lo disfrutaba y la gente también. Después quise hacer teatro, pero como no tenía estudios secundarios no pude ingresar en la Escuela de Teatro que estaba en el colegio 22, solo me permitían entrar como oyente ”, contó a LA OPINION.

Su actividad cultural dura lo largo de varios años. “Aprendí guitarra y estuve mucho tiempo arriba de los escenarios. Guitarreaba, silbaba y seguía con el humor. Más tarde trabajé con ''''Juancito'''' Nime, mi gran amigo y compañero, que Dios lo tenga en la gloria ”, se refirió también a su participación en la obra“ Serapio”.

En la misma línea adicional: “Con el humor y el mal por todos lados, la verdad que no me puede quejar, no le puedo pedir más nada a Dios. Recorrí Salta, Jujuy, Tucumán, Santiago del Estero, Mar del Plata, Córdoba. Lo hice en los festivales que me invitaban o en cenas-show, secundando a los principales artistas”.

Hasta que un día le puso punto final a su trabajo cultural. “Llegó un momento en que me puede, estaba tomando muchos riesgos en la ruta y no lo quise hacer más. Fue una etapa que disfruté y gané plata. Con eso terminé mi casa, después falleció mi señora y se pudrió todo. Mis hijos se repartieron y desde ese momento decidieron hacer esta vida”.

La vida en la calle

Aunque no le supo decir al Diario con fecha de precisión, Del Valle acumula varios años "viviendo en la calle". Tiene 7 hijos, 5 nietos y hermanos y asegura que es buena la relación con su familia. “Ayer me vino a visitar un hermano que vive en Rosario”, le expresó LA OPINION en uno de los bancos de descanso de la Plaza 25 de Mayo, lugar en el que se pasa la mayor parte del día.

“El Negro Caro” aclaró que la situación personal por la que atraviesa fue una “elección de vida”. “Estoy así porque yo quiero estar así, es mi decisión y además me hago una moneda. Me siento cómodo y tengo mi casa en la que ahora se encuentra una de mis hijas. De noche paro en un hotel (Sheraton) que me cobra 500 pesos, pero al otro día estoy bien temprano en la plaza”, contó.

Del Valle explicó que junta el dinero pidiendo monedas en las esquinas. “La gente me aprecia, no tengo problemas con nadie y la mayoría me ayuda. Pero no sólo tengo el gasto del hotel, también tengo otros. Durante el día me tomo un litro de vino, me compro cigarrillos y la comida. En eso siempre fui sincero, me gusta tomar, pero no para emborracharme, es una enfermedad, como la de ser fumador. Por eso no funcioné en los matrimonios que tuve, no sirvo para hacer esa vida”.

Para este exartista, que se considera católico y asegura rezar cuando puede, la calle es su refugio y no hay frío o calor que le impida estar en el lugar que desea. “Me gusta esta vida y paso todo el día en este lugar, desde que amanece hasta que oscurece. Me las voy arreglando como puedo”, revisó.

También manifestado que no tiene perspectivas de vida: “Que sea lo que Dios quiera, no tengo un objetivo. Me alcanza con tener una moneda en el bolsillo y levantarme todos los días para comprarme lo que yo quiero. Me gusta tomar, no soy alcohólico, pero también soy goloso y cuando puedo probar chocolates”.

En el cierre de la charla con LA OPINION, "El Negro Caro" expresó: "Estoy bien así como estoy, quizás me esté faltando algo de ropa, pero esta es la manera que elegí de vivir y no me quejo".


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