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GUP envió una carta a Javier Martínez en la que los comercios del sector “que abren sus puertas para la cena” piden seguir funcionando luego de las 23:00 “para no ir a la quiebra”.
El reclamo del sector gastronómico local “que abre sus puertas para la cena” solicitando la ampliación del horario de atención -actualmente es hasta las 23:00-, reflejado por LA OPINION la semana pasada, se oficializó en las últimas horas con una carta dirigida al intendente Javier Martínez por Gastronomía Unida Pergamino (GUP).
“Consideramos de extrema necesidad poder extender el horario de apertura. De no ser posible nos veremos obligados a cerrar nuestros locales ya que es imposible e inviable poder seguir trabajando de esta manera”, expresa Gastronomía Unida Pergamino en un tramo de la misiva al Ejecutivo Municipal. Asimismo pide “encarecidamente” al intendente que extienda el horario más allá de las 23:00 “para no ir a la quiebra” al tiempo que expresa: “Entendemos que dicha decisión es totalmente a cargo de su gestión”. Desde Gastronomía Unida Pergamino “no comprendemos la razón de esta decisión (establecer que el horario de apertura sea hasta las 23:00) por parte del Municipio teniendo en cuenta que tanto los decretos nacionales como provinciales no indican ninguna limitación horaria”.
La carta dirigida al intendente
“En primer lugar queremos hacerle llegar nuestro reconocimiento por la gestión que se está realizando durante esta pandemia. Entendemos el contexto en el que nos encontramos y comprendemos la difícil tarea que deben llevar a cabo todas las personas que conforman su equipo de trabajo. Por eso queremos agradecerles y ponernos a su disposición en lo que consideren podamos ayudar, y así sobrellevar todos juntos esta crisis, sin antecedentes, a la que nos enfrentamos. No obstante, necesitamos comprenda en detalle una de las tantas problemáticas de nuestros sector en la actualidad.
“Los locales gastronómicos que abren sus puertas para la cena (restaurantes, bares y cervecerías) se encuentran con las siguientes problemáticas por la limitación horaria. 1.- La gente no concurre a cenar ante de las 21:30, en su mayoría, dado que en nuestra cultura la gente difícilmente cene antes de dicho horario. Al llegar al local hasta que la persona es atendida y puede hacer su pedido lleva al menos 20 minutos, si ordenan por ejemplo un bife de chorizo (30 minutos de cocción) y luego calculamos el tiempo que necesita el comensal para comer, se termina el horario en que se puede permanecer en el local por lo cual se hace imposible la oferta por ejemplo de entradas o postres reduciendo aún más la posibilidad de venta. El costo de brindar un servicio de cena se vuelve imposible de afrontar teniendo en cuenta que solo podemos ofrecer menos del 50 % de nuestros productos.
“2.- Siguiendo el protocolo vigente ya son muchísimas las restricciones a nuestras posibilidades de trabajo. A saber: 50 % de la capacidad, solo 4 personas por mesa, limitación horario. Junto a esto se suma la caída de ventas por la crisis económica y sanitaria que estamos atravesando. No obstante nosotros debemos hacer frente a casi la totalidad de los impuestos, servicios y gastos que nuestros negocios deben afrontar normalmente.
“3.- Los locales que contamos con personal con contratación full time debemos seguir afrontando, como lo hicimos durante toda la cuarentena, la carga salarial completa y se vuelve imposible pudiendo trabajar con una limitación horaria en donde no podemos vender el total de nuestros productos, tampoco podemos tener recambio de mesas, tampoco se vuelven atractivas nuestras ofertas.
“4.- No comprendemos la razón de esta decisión por parte del Municipio teniendo en cuenta que tanto los decretos nacionales como provinciales no indican ninguna limitación horaria. Junto a esto, para nosotros es muy difícil también poder explicarles a los clientes porque debemos “echarlos” a las 23:00, cuando no podemos encontrar ninguna lógica en dicha normativa. No comprendemos, como así tampoco nuestros clientes, cuál es la razón para dicha limitación que tanto dificulta nuestro trabajo.
“5.- Entendemos que por estar “abiertos” es aún más difícil contar con la ayuda económica del Gobierno nacional por lo cual nos perjudica, aún más, poder no llevar a la quiebra a nuestros negocios. El solo hecho de tener que abrir las puertas de nuestros negocios conlleva un altísimo gasto que no podemos cubrir con el acotado horario de servicio.
“Los negocios gastronómicos que solo brindamos servicio de cena y/o bar no podemos seguir funcionando y afrontar nuestras obligaciones si no es posible extender el horario de venta para poder brindar un servicio completo. Teniendo en cuenta que al día de la fecha cumplimos con todo lo requerido, invertimos y pusimos en funcionamiento nuestros negocios a partir de lo que indica el protocolo para nuestra actividad, consideramos de extrema necesidad poder extender el horario de apertura. De no ser posible nos veremos obligados a cerrar nuestros locales ya que es imposible e inviable poder seguir trabajando de esta manera.
“Por todo lo expuesto anteriormente, les pedimos encarecidamente su ayuda para no ir a la quiebra y por favor puedan desestimar con la mayor antelación posible la restricción horaria establecida para locales gastronómicos. Entendemos que dicha decisión es totalmente a cargo de su gestión. Por favor ayúdenos y déjenos trabajar, cumpliendo las normas necesaria para protegernos y proteger la salud de nuestros vecinos, como lo indican los protocolos nacionales y provinciales. No limite nuestra actividad más de lo necesario para cuidar la salud de todos”.
