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La mole que se erige en Alem y Biscayart sigue motivando interrogantes en la gente que todavía no se anotició que se trata de una estación de bombeo pero también en quienes, aun sabiendo eso, desconocen cómo esta estructura será de utilidad para evitar anegamientos.
Su presencia es imponente, a un punto casi molesto para ese paisaje tan natural que la rodea. Pero, como sucede con muchas cosas, ya los pergaminenses nos acostumbraremos y hasta apreciemos esa mole de cemento que se levanta en el terraplén, en la zona baja de Biscayart y Alem. Es que más allá de lo estético, se trata de una obra que aportará al mejor escurrimiento del agua de lluvias.
Se trata de la cuarta estación de bombeo, que está en su fase final.
Luego de meses de trabajo de obras civiles, el viernes a la tarde llegaron las bombas y el grupo electrógeno para ponerla en funcionamiento.
Esta estación de bombeo forma parte de un conjunto de otras tres que fueron licitadas en julio de 2017 por un monto aproximado de 75 millones de pesos; en aquel momento se presentaron cinco ofertas y la empresa Eduardo Colombi S.A. fue la que ofreció el mejor precio sobre esta inversión que es afrontada por el Gobierno provincial.
Cabe aclarar que las estaciones de bombeo estarán monitoreadas por la Municipalidad y funcionarán con energía eléctrica, por lo que es imprescindible que cada una esté dotada de un grupo electrógeno para garantizar su funcionamiento permanente, máximo en horas críticas, cuando también el suministro eléctrico suele fallar.
Así funciona
En los casos en que el arroyo Pergamino venga colmado y no permita que el agua de la ciudad escurra hacia allí, las estaciones cuatro estaciones se pondrán automáticamente en marcha. “Esto antes se hacía con bombas móviles, que había que trasladar cada vez que teníamos algún tipo de complicaciones y ese entonces el personal se metía en el agua con esos equipos”, recuerda el arquitecto José Salauati, titular de Desarrollo Urbano.
“Esto queda subsanado, ya que estas estaciones, además de energía eléctrica, cuentan con grupos electrógenos que en caso de algún inconveniente puede igual poner en marcha los equipos; esta obra es preventiva para la ciudad”, señaló el funcionario local y dijo que los operarios municipales fueron entrenados para su uso.
“Con estos equipos podemos garantizar que el agua que llegue al margen del Arroyo se podrá devolver al cauce minimizando los riesgos para la zona ribereña”, aseguró el secretario Salauati.
