Los nonagenarios de Pergamino

Por el Dr. Mario L. Gospodinoff para la Redacción de LA OPINION. 

Durante los muchos años que viví en el extranjero me mantuve informado de los acontecimientos de Pergamino, mi ciudad natal, leyendo LA OPINION, el diario local. Lazos afectivos de mi esposa y los muchos amigos comunes que todavía frecuentamos, hicieron que el hábito se sustentara de martes a domingo y fuera la primera información que compartiéramos a la hora de la cena. Una observación que surgió de mis lecturas fue el darme cuenta del alto porcentual de nonagenarios que engrosaba la lista de difuntos que publica el Diario. En episódicas visitas a Pergamino comenté mi observación en círculos de amigos y familiares e intenté indagar acerca de estadísticas oficiales que soportaran o no, el valor clínico de una observación empírica. Mi pedido de datos, que son de dominio público, no fue escuchado porque quién sabe qué propósito extraño perseguía con mi indagatoria.
Al final de los años ‘90 apareció un artículo en National Geographic, prestigiosa revista americana en la que Dan Buettner escribió “Secretos de una Larga Vida” que luego expandió al completar su investigación pocos años más tarde, en el conocido libro: The Blue Zones o Las Zonas Azules, como se dio en llamar a las comunidades que en el mundo agrupan a un número elevado de longevos y que están ubicadas en: Okinawa (Japón); Loma Linda(California); Nicoya (Costa Rica) e Icaria(Grecia).
¿Es Pergamino una “Zona Azul” no estudiada?
Desde el 30 de Septiembre hasta el 30 de Noviembre de 2020 llevé un recuento diario de los nonagenarios fallecidos en nuestra ciudad, usando los avisos fúnebres de LA OPINION. Esta información no es 100 por ciento correcta ya que hay muertes no informadas que no pude incorporar. Soy de la opinión que las observaciones que presento aquí se podrían usar como base para que la Unnoba u otro consorcio profesional, dé prioridad al tema de los nonagenarios, que ayudaría y/o serviría de base para la prevención y el cuidado de los pergaminenses de todas las edades y la adopción de un estilo de vida saludable. Pergamino también pareciera tener una alta concentración de muertos de la sexta década de la vida, que merecería ser investigada por autoridades sanitarias.
Octubre 2020
Total de muertos reportados: 123
Mayores de 90 años total: 16
Mayores de 90 años por sexo: 9 mujeres-5 hombres.
Mayores de 100: 2 mujeres
Total porcentual mayores de 90 años: 13,01%.

Noviembre 2020
Total de muertos reportados: 101
Mayores de 90 años: 17
Mayores de 90 años por sexo: 12 mujeres-4 hombres
Mayores de 100: 1 mujer
Total porcentual mayores de 90 años: 16,83%

Los estudios científicos actuales revelan quede aquellas personas que llegan a la décima década, en solo el 25 por ciento de los casos estaría relacionado a la genética y el 75 % restante, por el estilo de vida y elecciones saludables que las personas eligen.
El alto porcentaje de nonagenarios observado en Pergamino es producto de cientos de factores que ha desarrollado lo que creo puede llamarse sabiduría comunitaria y que incluye, por sobre todo, la intensa interacción social, el manejo del estrés, las medidas preventivas, el no fumar, las no menos famosas “peñas” características de nuestra ciudad. ¿Quién no perteneció y/o pertenece a una peña? Las hay: peñas del café matutino ya sea a la hora del desayuno o anterior al almuerzo y las innumerables variedades de peñas que implican el encuentro de grupos de amigos para la cena, una constante de nuestra ciudad, en general de lunes a viernes. A lo que hay que agregar las múltiples actividades de clubes barriales que ayudan a mantener la salud física contribuyendo a crear una barrera antiestresante de serenidad mental, factor destacado y fundamental para mantener el sentido de propósito.
No se conocen al presente terapias mágicas que alteren el ritmo cíclico unidireccional del vivir. La preocupación por la devastación que produce la vejez ha sido una constante, desde que existen los registros de la historia del hombre. El envejecimiento, con la pérdida gradual y progresiva de la resistencia física y la capacidad mental, la disminución de la masa muscular y el avance de la grasa, contribuyen a la fragilidad propia de la ancianidad que culmina con la pérdida de autonomía.
En todas las centurias de recorrido humano solo una medida al alcance de todos y para la que no se requieren emolumentos onerosos, ha sido la constante responsable por la prolongación de la vida: la moderación. El prestigioso profesor R. Kane dice que la meta para lograr una vida larga y saludable es la moderación en todos los órdenes. La mejor dieta es la moderación. En el caso de Pergamino creo que un estudio de los nonagenarios podría producir valiosas sugerencias usables en la prevención de enfermedades y la prolongación de la vitalidad individual.
El proceso de envejecimiento es unidireccional, desde el día del nacimiento y no puede ser revertido. Ha habido miles de individuos que enriquecieron vendiendo aire y la ilusión de que tomando tal o cual vitamina, haciendo una determinada dieta, consumiendo una marca de yogur, etcétera, etcétera, la persona lograría frenar y revertir la devastación de la vejez.
En mi juventud en los años ‘60, muchos recordarán lo que di en llamar el “ciclo rumano”. Una médica de Bucarest, Rumania, introdujo el uso de inyecciones de xilocaína usada para anestesia local, que cautivó a nuestro país con su fantasía redituable, pero sin base científica alguna que sustentara la hipótesis de renovación y prolongación de la vida. Por varios meses ahí fueron miles de intrépidos argentinos corriendo a Bucarest en busca de la cura milagrosa, aquellos que estaban vedados de recibirla por cuestiones económicas se conformaban auto inyectándose la xilocaína, que se podía adquirir -sin receta- en cualquier farmacia de barrio y ser partícipe de la renovación celular que supuestamente la xilocaína propiciaba, por consiguiente la prolongación de la vida. Un razonamiento obtuso justificaba el uso de la xilocaína diaria: “Mal no te puede hacer ni provocarte dolor tampoco”.
Todo aquel que venda este tipo de medicinas no es más que un charlatán que esquilma a los incautos consumidores.
Lo valioso de una población que tiene un alto número de nonagenarios es el potencial educativo y de creación de hábitos saludables, que harían posible la extensión de la vida hasta la décima década. Un esfuerzo mancomunado de las escuelas, los equipos de investigación universitaria, el Municipio y la gente de Pergamino, redundaría en un beneficio comunitario basado en la experiencia de vida de los nonagenarios. Este concepto proyectado en el tiempo podría convertir a Pergamino en una ciudad donde la gente quisiera jubilarse y ser parte de programas de atención y entretenimiento como son las caminatas organizadas en el muy conocido Terraplén.