Saint Amant III: el jueves será la cuarta audiencia en San Nicolás

Desde su inicio, el 12 de junio, se han escuchado los testimonios de sampedrinos. En septiembre se dará paso a las causas de pergaminenses: Omar Lalli, que fuera secretario de Luz y Fuerza; Alejandro Giménez secretario del Sindicato de Canillitas; Alberto Kipen, ingeniero del Inta que fue detenido junto a su esposa Alicia Cevedo.

Desde principios de junio que en la vecina ciudad de San Nicolás se desarrolla el juicio por delitos de lesa humanidad por la megacausa Saint Amant III, que ya en su tercera fase, aglutina las causas en las que el sindicado como autor por estar al mando de las órdenes es el excoronel Manuel Fernando Saint Amant. Como en las ediciones anteriores, incluye casos de pergaminenses, que serían tratados en septiembre próximo.

El jueves tendrá lugar la cuarta audiencia en el Auditorio “Macacha Güemes” de San Nicolás, luego de las ya realizadas el 12 y 20 de junio y el 4 de julio.

La tercera edición de este juicio es un desprendimiento de Saint Amant II que se desarrolló en el Concejo Deliberante de nuestra ciudad en el transcurso de 2015. Manuel Saint Amant era un teniente coronel, responsable del área militar 132 durante la Dictadura, que tenía un área de incidencia amplio, por eso las causas regionales abarcan a las distintas ciudades comprendidas en dicha jurisdicción: Pergamino, San Pedro, San Nicolás, Baradero, por lo que el juicio ha adquirido una característica de itinerante.

El teniente Saint Amant falleció luego de ser juzgado en el juicio desarrollado en nuestra ciudad, en el que fue condenado a otra cadena perpetua. Pero como esta es una causa que se desprende y surge a partir de algunos testimonios del Saint Amant II, con nuevos imputados y nuevas víctimas, se decidió considerar el mismo nombre además de que forma parte de una referencia.

Víctimas pergaminenses

De acuerdo con lo expuesto por la Asociación por la Memoria y los Derechos Humanos de Pergamino, hay víctimas pergaminenses en los casos que se juzgarán: Omar Lalli, en aquel momento secretario general del Sindicato de Luz y Fuerza de Pergamino; Alejandro Giménez que por aquellos años secretario general del Sindicato de Canillitas de Pergamino; Alberto Kipen, ingeniero agrónomo en el Inta Pergamino que fue detenido junto a su esposa Alicia Cevedo.

Imputados

Los imputados de la causa son: Oscar Alberto Rodríguez, en aquel momento oficial inspector en la Comisaría de Pergamino, hoy retirado de la Policía de la Provincia de Buenos Aires con el grado de comisario. Vive en Pergamino.

Antonio Federico Bossié, mayor, oficial de Operaciones e Inteligencia del Batallón de Ingenieros 101 a cargo del Área 132.

Guillermo Aníbal Piccione entre 1975 y 1976, plana mayor de Personal y Logística del Batallón.

Omar Andrada desde 1976 mayor y ejercía la Jefatura de la Seccional San Nicolás del Destacamento de Inteligencia.

Bernardo Luis Landa, capitán, oficial de Personal y Logística hasta 1978.

Jornadas

En contacto con LA OPINION, Anabel Longinotti, presidenta de la Mesa de la Memoria, Verdad y Justicia de San Nicolás, que junto a su hermana fueron víctimas de la dictadura, contó que el inicio del juicio se dio el 12 de junio con la lectura de la requisitoria. “En una audiencia posterior se comenzó con la declaración de las víctimas de San Pedro, fundamentalmente la familia Galarza. Se desarrolló una nueva jornada el 4 de julio mientras que la próxima audiencia tendrá lugar el 1º de agosto donde se continuará escuchando los testimonios pertenecientes a la ciudad de San Pedro y otros de San Nicolás”.

Es importante aclarar que las audiencias se extenderán hasta octubre y se prevé que las causas ligadas a Pergamino sean tratadas en septiembre.

La historia de Linda

Haciendo una crónica de las audiencias testimoniales, Anabel relató que el 20 de junio, la primera en declarar fue Linda Farías de San Pedro: “Ella vivía en una casa muy humilde del barrio Obrero de esa ciudad, era delegada de los trabajadores de la fruta y trabajaba socialmente en su barrio con muchos compañeros en un comedor para niños y familias necesitadas. Fue secuestrada en la noche del 30 de junio de 1976, en su casa, dejando a sus cuatro hijos pequeños solos. Comenzó de esta manera un derrotero tristísimo; la tabicaron, le pusieron capuchas, la violaron, fue llevada a un centro clandestino, fue torturada con la picana eléctrica, golpeada, luego trasladada a la Comisaría de Somisa. De allí a la Unidad Penal Nº 3, donde estaba el pabellón de presos políticos, para luego ser trasladada a la cárcel de Devoto. Allí pasó cinco años sin recibir ninguna visita, sin conocer el paradero de ninguno de sus hijos, en una situación de desprotección y abandono. “Sus dos hijos varones habían sido llevados a un hogar de La Plata, de allí se escaparon, llegaron a San Pedro. Allí su tía se hizo cargo de ellos y comenzaron a buscar a los dos hermanos más pequeños”, agregó Anabel.

Prosiguiendo con la historia, el 2 de febrero de 1981 fue liberada. Le contó su historia a un taxista. Este le dio dinero, la llevó a Retiro donde se tomó un tren y volvió a San Pedro.Cuando llegó sus hijos no la reconocían por lo que empezó un gran trabajo para que sus niños la conocieran, había perdido su casa, su trabajo. Tuvo que comenzar de cero, con su hijo mayor construyó un rancho en un terreno fiscal, que es donde vive actualmente.

En la misma audiencia declararon dos de sus hijos, que en todo momento se quebraron recordando el pasado. “Los relatos nos hacen sentir que debemos seguir trabajando por memoria, verdad y justicia; estas historias no pueden quedar al interior de cada familia sino que deben ser conocidos por la sociedad entera que debe darse cuenta que no podemos construir un presente y un futuro con estas verdades sin ser dichas”, expresó Anabel.

Tercera audiencia

El 4 de julio se realizó la tercera audiencia. Los primeros en declarar fueron Benjamín Galarza y Jorge Magariños, ambos hijos de Linda Farías, que había declarado en la audiencia anterior.

En una parte de su declaración, acompañado por los psicólogos que contienen y acompañan a los testigos, Benjamín exhibió la única foto de los cuatro hermanos cuando eran chicos e inmediatamente recordó lo injustos que fueron con ellos ya que cuando apresaron a su madre los separaron, vivieron años creyendo que su madre había muerto en un incendio en la Cárcel de Devoto.

Después declaró Jorge, que afirmó: “Nos arruinaron la vida pero como somos fuertes pudimos salir adelante. Ojalá esto que nosotros hacemos hoy sirva para que nunca más ocurra en la Argentina el terrorismo de Estado, el genocidio, la vejación de los derechos y que estos jóvenes no tengan que pasar por esa historia”.

Luego declararon dos vecinos de Linda, Julio Peupin y Omar Cortese, presos políticos a los que se los interrogó sobre su conocimiento sobre otros presos políticos en el pabellón donde estaban detenidos en la Unidad Penal Nº 3.