Salauati: “El estado de las veredas de Pergamino es variable y esta condición no se vincula necesariamente a su ubicación”

Las veredas de Pergamino tienen ese qué sé yo, ¿viste? Parafraseando al genial Horacio Ferrer, LA OPINION sintetiza este informe que nace de un reclamo constante y genuino de la gente. Desde lo estético y mucho más desde lo práctico, caminar por la ciudad es desagradable. En el Centro, por las roturas causadas por los años, la desidia y principalmente el arbolado; en los barrios porque en algunos ni siquiera hay sendas y la calle pasa a ser la única vía posible. 

DE LA REDACCION. Tanta justa preocupación y debida inversión para proveer de rampas que permitan a discapacitados en sillas de ruedas subir a las veredas pierden su sentido si éstas están intransitables. Es sencillamente imposible para estas personas o madres con sus cochecitos andar por una arteria de corrido sobre la vereda, además de ser un peligro latente para la salubridad de cualquier transeúnte. Baldosas faltantes, raíces salidas de su cauce que generan deformidades hasta romperlas, obras en construcción que prescinden de una acera, al menos provisoria, o directamente la ocupan más allá de lo permitido ubicando allí sus parapetos protectores. Todo eso hace que, indefectiblemente, en algún momento debamos bajar a la calle o directamente cruzar a la acera de enfrente. En fin, para qué informarle al vecino lo que padece a diario. 

Encontrarle una solución implica identificar a los responsables y es allí donde el asunto presenta un sinfín de situaciones posibles y vacíos legales. La más común es que, siendo el frentista el responsable del mantenimiento de su vereda, argumente que las roturas fueron ajenas a su voluntad, causadas por las raíces del arbolado público por lo cual se niega a restaurarla hasta tanto el Municipio dé una solución definitiva a la causa y participe económicamente de la reparación del daño. Y si una persona tropieza con una baldosa levantada por una raíz o con la raíz propiamente dicha, ¿quién es responsable civil sobre sus consecuencias? ¿El vecino? ¿El Municipio? ¿Ambos?

La voz municipal

“El estado de las veredas de Pergamino es variable y esta condición no se vincula necesariamente a su ubicación o al sector que pueda ser materia de análisis”, manifestó el arquitecto José Salauati, secretario de Obras Públicas del Municipio durante una nota con el Diario. “En principio se puede efectuar una primera gran clasificación entre los sectores o barrios que tienen vereda y aquellos que no la tienen; en general, en el caso de los primeros, son lugares que tienen ya muchos años de consolidación; mientras que en el segundo de los puntos a analizar son más humildes o en desarrollo dado que están ubicados en la periferia”, agregó el funcionario. “Pero aún así esto no constituye una regla permanente porque barrios residenciales o áreas donde se radican los clubes de campo que presuponen mayor nivel socioeconómico tampoco tienen vereda”, indicó el arquitecto Salauati. 

- ¿Qué evaluación puede llevarse a cabo del estado general de las aceras dado que se observan deficiencias? 

- En un mismo sector, y aún en una misma cuadra, las veredas presentan diferencias en su estado y es difícil evaluar o emitir juicio de valoración que pondere su estado general en toda la ciudad.

Obviamente que no escapa a ninguna observación que, por ejemplo, hay sectores del área central que están deteriorados, y que por tratarse de veredas de mayor tránsito que otras de la ciudad afectan una gran cantidad de vecinos sobre todo aquellos que sufren algún tipo de discapacidad motriz debido a su condición física o a su edad.

Por su parte, el estado de las veredas que están cercanas a edificios públicos o instituciones de cualquier tipo, inclusive centros comerciales, asume una mayor preponderancia dado que afectan a muchos usuarios que necesariamente tienen que concurrir a esos lugares con frecuencia o regularidad.

- ¿Por qué se llega al estado deplorable que se observa en algunas? ¿No hay poder de policía por parte del Municipio en este asunto? 

- Con respecto a las causas que dan lugar a la falta de mantenimiento o a un estado deficiente pueden mencionarse las posibilidades económicas del vecino, su mayor o menor preocupación en el mantenimiento, la roturas producidas por las instalaciones no adecuadamente reparadas, el efecto de las raíces del arbolado público o el deterioro de los cordones; a su vez contamos en este sentido con el tránsito inadecuado de vehículos sobre veredas o áreas peatonales. La vereda constituye un espacio público pero su construcción y mantenimiento es responsabilidad del frentista, o sea de carácter privado existiendo una legislación local que así lo prevé. 

Cuando una vivienda se construye la vereda constituye una parte de la obra, de igual manera cuando se deteriora con el paso del tiempo es el vecino quien la cambia o la repara; en relación a esto cuando el Estado necesita intervenir en la vereda colocando un medidor de agua, el vecino hace presente su preocupación por la afectación que pudiera tener.

Asimismo cuando una empresa tiene que efectuar tendido de instalaciones por la vereda o la calzada debe presentar un proyecto y solicitar previamente la autorización del  Municipio; ese permiso está condicionado a ciertos requerimientos y entre ellos está la reposición adecuada de la vereda. En caso de que así no se genere, son primeramente intimadas a su reparación y multadas si así no lo hacen; a su vez tenemos que remarcar la colaboración del vecino advirtiendo sobre esta situación más allá que se hacen los controles durante la ejecución de los trabajos.

- ¿Hay control sobre las obras en construcción, que ocupan veredas casi en su totalidad entre cercos y volquetes?

- Se exige la presencia de cercos de obra de características y dimensiones determinadas durante la construcción; esta misma normativa establece las condiciones necesarias para garantizar la circulación sin riesgo de los peatones y lógicamente que las disposiciones deberán adaptarse a circunstancias como el ancho disponible de veredas, el tipo de las obras, la presencia de árboles y en relación a los controles estamos intensificando cada una de las inspecciones que se realizan regularmente.

- ¿Está previsto para el próximo ejercicio un programa para procurar la mejora en el estado de las veredas?

- En primer lugar efectuaremos la categorización de todos los corredores o sectores más transitados que resulten prioritarios en su mejoramiento; posteriormente, y a través de la inspección de personal de Contralor Urbano y de la Dirección de Obras Particulares, se identificarán las veredas para poder calificarles en su estado especificando el motivo de la rotura y su dimensión aproximada. 

Si el mismo está originado en el efecto producido por el desarrollo de las raíces del arbolado público, se hará el recorte de raíces o la extracción del árbol si correspondiese; a su vez si se produjo por la rotura de los cordones se procederá a su reparación para posteriormente requerir al frentista el arreglo de la vereda. En el caso de que no lo hiciera en un lapso prudencial se evaluará la posibilidad de aplicar las sanciones establecidas o que el Municipio proceda a repararlas con cargo al propietario de inmueble. Este programa  involucra la intervención de  varias áreas para efectuar un trabajo coordinado y la necesidad de disponer de equipo y personal suficiente para ello. 

Asimismo cabe decir que todo implica tiempos de programación para concretar cada una de las notificaciones e intervenciones para hacer las obras que permitan traer las soluciones que demanden los vecinos aunque demandará quizás plazos extensos para que se evidencien mejoras sustanciales.

- Es decir que el Municipio, en sus tiempos, ¿tomará cartas en el asunto?

- La voluntad del vecino para mantener su vereda en buenas condiciones es el aspecto medular para lograr un buen tránsito en las mismas; el Estado municipal deberá convocarse para actuar cuando se requiera de su intervención aunque vecinos y Gobierno tendrán que interactuar para lograr este objetivo.

Dirección de Espacios Verdes, entre los cuantiosos reclamos y el propósito de jerarquizar el área

Pedro Salas es el titular de la Dirección de Espacios Verdes, área dependiente del Municipio que se encarga de dar respuesta a las denuncias, reclamos y solicitudes que los ciudadanos hacen respecto del arbolado público.

En una entrevista con LA OPINION, el funcionario instó a los ciudadanos a tomar conciencia respecto de la importancia que reviste la presencia del árbol en la ciudad, a pesar de los trastornos que causa –incluso dentro del hogar- el crecimiento de las raíces cuando la especie colocada, en algunos casos hace más de 50 años, no ha sido la adecuada.

- ¿De quién es el árbol?

- El árbol de la calle en realidad es de todos, es arbolado público, es de los pergaminenses.

- ¿Quién lo planta?

- Según las leyes y ordenanza vigentes quien debería plantar los árboles es el Municipio y el área de incumbencia que es Espacios Verdes. No obstante muchos vecinos plantan por sus propios medios y allí se genera un problema porque muchas veces plantan especies que no son recomendadas.

- ¿Cuáles son las especies recomendadas para plantar?

- Depende del lugar en que se plante y de muchas circunstancias que hay que tener en cuenta, entre ellas: la ubicación de la vereda, el tipo de vereda, la ubicación de los servicios, el paisaje o la especie predominante donde se planta.

- En el área urbana, ¿cuáles son las especies predominantes?

-Estamos culminando con un censo de arbolado, armando una base de datos. A partir de las cuales vamos a tener información precisa. Las especies predominantes en los barrios y en el centro son fresnos, crespones, plátanos, acacias. En Pergamino nunca se realizó un trabajo de censo del arbolado.

- Si un vecino decide plantar un árbol ¿es pasible de una sanción?

- En realidad la normativa prohíbe que el vecino plante un árbol pero si eso pasa la responsabilidad es de la Dirección de Espacios Verdes por eso, y respecto de la forestación, nosotros le pedimos a los pergaminenses que quieran plantar un árbol en la vereda de su frente que se comunique al 147 y haga efectiva su solicitud. La tarea de plantar un árbol no se puede realizar durante todo el año sino en un período de tres meses. 

- ¿A qué número deben comunicarse los pergaminenses que quieran realizar una demanda o denuncia?

- La solicitud de árboles se debe realizar llamando al 147. Todos aquellos reclamos que tengan que ver con la copa de los árboles como despeje de cables, de luminarias también deben hacerse al 147. Las denuncias o reclamos que están relacionados con el suelo del árbol, es decir, por raíces, estado general del árbol o solicitud de extracciones se solicita a través de un expediente generado en Mesa de Entrada, el interesado debe presentar una nota en la que explique los motivos por los que se requiere la evaluación del árbol. El análisis de los árboles se realiza individualmente.

El caudal de reclamos es muy grande y siempre estamos tratando de jerarquizar el área para cumplir con todos los reclamos y así dar mejor respuesta y servicio del que ofrecemos.

- ¿Cuál es la denuncia o reclamo más frecuente?

- Tenemos muchísimos reclamos por poda de árboles. Es importante aclarar que la poda se realiza desde fines de abril hasta principios de septiembre. Lo mismo pasa con los recortes de raíces, son trabajos estacionales. Registramos una importante demanda que debemos atender en  poco tiempo y muchas veces se nos complica.

- ¿Por qué se realizan determinados trabajos en determinadas épocas?

- Porque se busca que sea la época de reposo de los árboles, cuando éstos no movilizan las reservas y es la época en que le hacemos menos daño a la salud del árbol. No obstante durante el verano hacemos algunos trabajos de despeje de cables y de luminarias para dar respuesta a los vecinos.

- ¿Qué pasa cuando las raíces de los árboles generan levantamientos de veredas o inconvenientes en la infraestructura dentro de las viviendas? ¿Cómo trabaja Espacios Verdes en ese sentido?

- Registramos el caso gracias al expediente que generó el vecino, vamos al domicilio y hacemos la evaluación. Hay muchos árboles cuyas raíces han avanzado demasiado provocando roturas en las veredas. En el caso en que amerite se realiza el recorte de raíces. Para ello el árbol debe ser desenterrado, se limpia el radio de un metro a la redonda del árbol, se recortan las raíces sobre todo aquellas que originan más daños y luego se cubre con un nylon las raíces recortadas del árbol para evitar que sigan creciendo.

- ¿Por qué se registran tantos casos de levantamientos de veredas a causa de las raíces?

- El principal problema es que no se le da espacio al árbol para crecer, muchos de ellos están ahogados contra el cemento. Una recomendación que hacemos a los vecinos es que dejen suficiente espacio a los árboles para que se pueda filtrar el agua, que las raíces respiren, mientras más espacio tenga el árbol menos problemas tendremos en las veredas. El espacio que se deje para el árbol debe ser, como mínimo, de un metro por un metro. Mientras más veredas verdes tengamos en la ciudad mayor será la superficie de filtración que tengamos. La ordenanza de veredas indica que el paso reglamentario de línea municipal es de un metro, todo lo demás puede ser verde.

- Una vez que la rotura fue provocada por el crecimiento de las raíces en las viviendas de los particulares, ¿quién se debe hacer cargo económicamente de la reparación?

- En ese punto tenemos muchos problemas con el vecino. La vereda es de uso público pero el mantenimiento está a cargo del propietario de la vivienda. El Municipio recorta las raíces de manera gratuita pero la reparación de las veredas o de las roturas generadas por las raíces del árbol corren por cuenta del frentista. Tratamos de generar un compromiso en los vecinos para que ellos, luego del recorte de raíces, realicen las reparaciones de las veredas. De nada sirve que nosotros hagamos las intervenciones si después el propietario no arregla su vereda.

- ¿Cuál es el mensaje que les gustaría dar a la comunidad?

- Estamos trabajando con el Consejo del Arbolado que se volvió a convocar después de muchos años porque creemos que es fundamental la concientización a la comunidad respecto de la importancia de los árboles y en ese caso hay mucho para hacer. Como sociedad tenemos un cierto nivel de analfabetismo ambiental y por eso hay mucho por hacer en este sentido. Hay vecinos que son conscientes y muy respetuosos del ambiente pero en líneas generales falta que tomemos conciencia de la buena presencia del árbol que es un elemento urbano más, que forma parte de nuestra convivencia, tiene una importancia superlativa con los servicios que presta, entre ellos, sombra, purificación del aire, funciones ecosistémicas importantes que no se ponen en valor.