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La sentencia fue dictada por el juez a cargo del Juzgado Correccional Nº 1, Carlos Picco por dos hechos ocurridos en julio de 2019 en el nosocomio local. El agresor recibió una pena de tres meses de cumplimiento efectivo.
El equipo de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 6 a cargo de Patricia Fernández pudo establecer con las pruebas recolectadas que a finales de julio de 2019, siendo las 00:00, el encargado de seguridad en el área de la guardia del Hospital San José fue informado que había un sujeto que estaba muy agresivo, al tiempo que su pareja había quedado internada porque había ingerido pastillas. Mientras el custodio cuidaba de la guardia, el imputado en reiteradas oportunidades quiso ingresar al área de internación y permanecer junto a su mujer, pero debido a que no ello no correspondía, lo condujeron al exterior. Siendo las 2:30 aproximadamente, personal de seguridad estaba recorriendo la guardia, cuando en el sector de urgencias se encuentra con este sujeto y le informa que se tenía que retirar. La reacción del hombre fue que comenzó a insultar verbalmente al agente y luego le refirió, textualmente: “Vos no sabes quién soy yo, te voy a agarrar en la calle y te voy a matar a fierrazos”, para seguidamente tirarle golpes de puño hasta que llegó a la puerta principal y le dio una patada sin romperla. Allí el empleado de Hospital intentó agarrar al exaltado individuo para reducirlo pero éste le aplicó un golpe de puño en el rostro con una llave, ocasionándole lesiones de carácter leve a la altura del ojo izquierdo.
Al día siguiente, siendo las 4:30, en circunstancias que dos policías se encontraban cubriendo el Hospital Zonal San José de Pergamino, en el sector de la guardia junto al personal administrativo del nosocomio, observan pasar al sujeto en cuestión, quien comienza a orinar en el estacionamiento de las ambulancias, por lo que el personal policial sale y le dice que no debía hacer eso ya que había menores en el lugar, a lo que se ofusca y refiere: “Ustedes no saben quién soy yo, yo los voy a matar a todos y a la rubia también que se cree que es dueña del Hospital”. Ante la flagrante amenaza, los funcionarios procedieron a la aprehensión del masculino colocándole la esposas de seguridad. Su pareja, al ver que lo habían detenido, comenzó a golpear los vidrios del área de Admisión, amenazó a una empleada, tiró un monitor al piso sin romperlo, para luego salir en defensa de su pareja, amenazar a los efectivos y también al personal de seguridad, aplicando golpes de puño a los mismos sin lesionarlos, por lo que proceden a su aprehensión.
Cargos y condena
Tanto los testimonios del personal policial como los aportados por los efectivos policiales fueron determinantes para el juez Carlos Picco para determinar la responsabilidad penal del joven que ocupó el banquillo de acusados en el debate oral celebrado en el mes de octubre.
La calificación legal de los hechos se encuadró en los delitos de lesiones leves, amenazas y resistencia a la autoridad en concurso real y el titular del Juzgado Correccional Nº 2 resolvió condenar al imputado a la pena de tres meses de prisión efectiva, la que se cumplirá con la modalidad de arresto domiciliario. En tanto que su pareja obtuvo el beneficio de la mediación penal por lo que no llegó a juicio la causa que tuviera en su contra por los delitos de amenazas y resistencia a la autoridad.
